Buscar resultados para calamaro

Andrés Calamaro – Honestidad Brutal Extra Brut

«La honestidad no es una virtud, es una obligación». Incluida en la portada interior del disco, pocas veces una frase me ha golpeado con tanta virulencia como esa, cuando se publicó el doble Honestidad Brutal en 1999. Lo peor de todo es que no sería la única asociada a este álbum que lo hiciera. Es un álbum repleto de textos y giros musicales que me marcaron de por vida. Por lo dicho, por lo cantado, por el estilo, por la pulsión, porque era el momento y un punto de inflexión vital que posteriormente se aumentaría con la locura quíntuple de El Salmón y que cambiaría mi forma de ver el mundo para siempre. Después de un disco poderoso como Alta Suciedad, que tenía una capa de efectismo popular muy acusado, lo de Honestidad Brutal era otra cosa. Menos ropaje, más víscera. Una dulzura hiriente de 37 cortes con enjundia. Uno de los mejores discos de ‘rocanlove’ escritos en castellano. Hace diez años escribía sobre él que su vigencia continuaba siendo plena y tal es así que hace pocas semanas ha visto la luz una edición extraordinaria que, además de remasterizar el doble original, añade un tercer disco de demos y versiones iniciales de una quincena de temas, además de tres cedés más con sesiones alternativas, colaboraciones, distintas mezclas, algunas versiones… Material añadido, que no sobrante, porque estamos ante un momento histórico para el artista y quizá también el canto de cisne de una forma de entender álbumes antes de que lo digital empezara a cambiar las maneras, los tiempos… la reflexión.

Lee el resto de esta entrada

Andrés Calamaro. El Ejido. 14 de mayo

Después del regreso a los escenarios en México hace unas semanas, primeros asaltos de una gira que se prevé cuantiosa, movida y heterogénea, Andrés Calamaro inició el pasado sábado su periplo en España en el Teatro Auditorio de El Ejido. Una plaza ‘extraña’, toda vez que se trata de la tercera ciudad de la provincia almeriense, pero que vino a engordar un tanto la solera estelar del municipio, que presume, como bien sabe y referenció el propio Andrés, de haber traído a The Rolling Stones (y hacerles tomar gazpacho para loa de las hortalizas de la zona) o haber celebrado un festival que reunió a nombres propios tan poderosos como Guns N’ Roses, Placebo, Pretenders, Deftones o Fun Lovin’ Criminals, además del propio Calamaro con Ariel Rot, allá por 2006. Tantas ganas como interrogantes, que se disolvieron pronto, para un concierto que acabó siendo una pura celebración de vida gracias a un especialmente feliz y comunicativo artista, por momentos pletórico, pues, como a Sabina, le sobraban los motivos. Se reencontraba al fin con los escenarios de nuestro país, al día siguiente recibía la Medalla de la ciudad de Madrid con motivo de la festividad de San Isidro, la nueva crew de sonido cumplió con creces (salvo una mínima incidencia en el segundo tercio de concierto) y además se encontró con un público bastante caliente, con presencia argentina, que elevó el nivel de los coros cuando era preciso y necesario. Tal era la sensación de comodidad que hasta compartió muchas de sus opiniones asalmonadas (es decir, contracorriente) a veces con más tino que otras, pero siempre con su particular Honestidad Brutal de sinceridad, sin que sea necesario estar de acuerdo en todo con él para disfrutar de una propuesta musical fantástica. Andrés inicia gira en España en un momento de dulce. Si pueden no se lo pierdan. (FOTOS: Jesús Amat, cedidas por cortesía a RockSesión).

Lee el resto de esta entrada

Andrés Calamaro – Dios Los Cría

Recurso de sobra conocido el de marcarse un disco de grandes éxitos remozado con colaboraciones. Pero, como ante todo en la vida, las cosas pueden hacerse bien, mal o regular. Pero es que, además, Andrés Calamaro tiene tanto repertorio y tipo de canciones en su currículum que le da para hacer otros cinco discos de este corte, con artistas diferentes en cada uno de ellos. Aquí ha optado por algo así como el smoking y lo clásico, con canciones llevadas a piano y voz, principalmente, con guitarras acústicas, algunas cuerdas y tipo crooner. Algo así como sus Romaphonic Sessions pero aderezado de grandes estrellas. Por tanto, al situarnos en la escucha y crítica del disco, hay que tener en cuenta que el artista y cantor ha optado por un sentido homogéneo y conceptual que hace que por momentos se antoje previsible pero, por otro, bastante grato y apacible durante todo el metraje. Desde aquí, que nos quedamos con todas sus facetas musicales (las opiniones personales sobre otros temas, libre es todo el mundo de tener las que considere), jaleamos a Andrés para que en unos cuantos meses reúna a una corte más noctámbula y bullanguera (no olvidemos que el propio Calamaro cantó en los tributos de Barricada y Def Con Dos, por dar dos ejemplos) para que saquen lustre a las seis cuerdas electrificadas y al bombo y caja. Dicho esto, con la misma técnica que empleé para el homenaje de Ni Tan Joven Ni Tan Viejo de Joaquín Sabina, vamos con la crítica, tema a tema, de cada una de las colaboraciones y revisiones. Y en el último trago, nos vamos.

Lee el resto de esta entrada

#Mis10de Andrés Calamaro

 

Incontinencia es una buena palabra para definir a Andrés Calamaro. No hablamos de la que asociamos casi de manera automática con el anuncio publicitario de Concha Velasco, sino que nos referimos a la que tiene que ver con la creatividad y, de un tiempo a esta parte, también con la verbal. Tiempos difíciles para la discordancia, para muchos la libertad de expresión solo es válida siempre y cuando lo que digas coincida plenamente con la opinión del que condena o aprueba. Porca miseria, cómo hemos acabado. Nos desviamos, una vez más, de lo que importa, que es la música y las canciones. Y de eso Andrés Calamaro la tiene y las tiene, mucha y de muchas formas. Del tango clásico al rock, del crooner al experimental, del salvaje al que viste frac. Del latigazo distorsionado a los arreglos de cuerda y tecla. Tenemos la suerte, a los que nos gusta, de que ha recuperado además su mejor forma, continuando de manera estajanovista un ritmo de publicación de lo más alto. Y con giras. Y en buena forma. Tras la tanda de Los Rodríguez de ayer no podía evitar incluir a Andrelo en esta lista de reediciones especiales del mes de julio. Por todo lo que me ha hecho sentir y vibrar esta lista de temas… y otros 50 o 60. Yo soy de los que se escuchaba el quíntuple Salmón de principio a fin. Así hemos acabado. Porca miseria, de nuevo. ¡Salud!

Lee el resto de esta entrada

Andrés Calamaro – Cargar La Suerte

No hace falta que regrese porque nunca se fue. Andrés Calamaro tiene nuevo disco y eso para quienes hemos recorrido mucha parte de vida con canciones de su autoría es como recibir en casa la visita de un viejo amigo. Una dosis medicinal para el alma, que alcanza un rincón olvidado en el momento que le damos al play por primera vez al nuevo material que osa toser los tótems de Alta Suciedad, Honestidad Brutal o El Salmón. Luego lo que escuchamos nos puede saciar (El Cantante, El Palacio de las Flores, Tinta Roja, Bohemio, Romaphonic Session, sobre todos, La Lengua Popular) o no (On The Rock, Volumen 11) pero siempre es un gusto comprobar que la llama sigue encendida. Aficionado a la tauromaquia y al boxeo, Andrelo (permítaseme la licencia) lidia y brega consigo mismo, con su imponente nivel alcanzado en entregas pretéritas. Lo bueno es que nunca engaña, siempre, cada uno de esos discos, incluidos los directos, han reflejado su momento vital. De los excesos llenos de insomnio al insomnio constructivo. En Cargar La Suerte encontramos a un artista sereno, seguro y en paz. No dispara ráfagas al aire ni se adorna en su porte porteño. Afina los tiros a pocas balas y se siente armado con una reclutada banda de altura. Doce temas entre los que hay poco de faena de aliño y donde refulgen nuevos destellos de maestría.

Lee el resto de esta entrada

Calamaro – Volumen 11

calamaro-volumen-11Gran ritmo de producción al que nos tiene ya de nuevo habituados Andrés Calamaro. Tras un Bohemio sucinto y certero, tres directos poderosos (uno de ellos con el maño Enrique Bunbury) evidenciaron el gran estado de forma escénico del argentino más español. Y si en Romaphonic Sessions en la entrada de la primavera del pasado año se ponía el frac (disco de crooner a-corazonado, grabado en pocas horas al calor del piano de su confidente Germán Wiedemer, un álbum para paladares exquisitos o oídos selectos, para salmones del bienvivir), en este Volumen 11 Andrés se calza los guantes de boxeo y pide pelea. Y lo hace en verbo y música. Descerrajando textos provocadores: el que más, ya saben, ‘Cazador de Ateos’, aunque no es el único; y con una música que en ocasiones se muestra cárnica y visceral, con el punto justo de saturación que, justo, da el Volumen 11. Un croché de blues sangrante, guiños recurrentes a Pappo, rock que en ocasiones deriva hacia ligeras ascendencias metaleras y hasta una brutal improvisación tomada en directo en Perú de más de… 11 minutos de duración.

Lee el resto de esta entrada

Andrés Calamaro – Romaphonic Sessions

Andres-Calamaro_Romaphonic-SessionsDel todo imprevisible e impredecible. Desde que rompiera con cualquier tipo de convencionalidad con aquel doble eterno llamado Honestidad Brutal y más aún con su mastodóntico El Salmón, Andrés Calamaro sume a su público en una constante incertidumbre sobre cuál va a ser su siguiente paso. Hay quedan su latente El Cantante, el arrebatado Tinta Roja, el preciosista El Palacio De Las Flores, el vitalista La Lengua Popular, el rugoso On The Rock o el veneno de Bohemio. También en vivo nos legó esa joya con la Bersuit Vergarabat en El Regreso, el Dos Son Multitud con Fito & Fitipaldis, el Hijos del Pueblo con Bunbury o ese doble pasional Jamón Del Medio y Pura Sangre. Ahora, Calamaro vuelve a dar un paso en su justificada megalomanía (esa de la que le acusan los que no están de acuerdos con sus opiniones personales) y retoma aquello de Grabaciones Encontradas, dándonos un nuevo volumen, el tercero, 20 años después de su segunda entrega. Romaphonic Sessions es un disco de crooner a-corazonado, grabado en pocas horas al calor del piano de su confidente Germán Wiedemer. Quizá un álbum para paladares exquisitos o oídos selectos, para salmones del bienvivir.

Lee el resto de esta entrada

Bunbury & Calamaro – Hijos Del Pueblo

207 Bunbury y CalamaroCasi por sorpresa la temporada de otoño vino con el anuncio de una gira conjunta de Enrique Bunbury y Andrés Calamaro. Demasiado circunscrita en el tiempo y en el espacio, para mal de quienes hemos deseado algo así desde hace años. Nueve fechas en 23 días y todas ellas en México. Suertudos ellos, vieron la concreción de un sueño o idea que rondó hace aproximadamente una década las cabezas de estos dos artistas internacionales. Aquel esbozo también incluía a Jaime Urrutia y a Loquillo. Dicen que los egos fueron los que echaron al traste el proyecto… Visto lo visto con el paso del tiempo, podemos hacernos una idea de por dónde fueron los tiros. El caso es que Hijos Del Pueblo, este disco en directo que reúne las canciones que interpretaban los dos sobre el escenario en la gira, viene a disminuir las ganas de quienes no disfrutaron del espectáculo en situ. Corto, diez temas, y sin DVD. Un álbum de audio de la vieja escuela, pero que refleja la grandeza de dos intérpretes en su mejor estado “cantor”, que diría el propio Andrés.

Lee el resto de esta entrada

Andrés Calamaro – Pura Sangre / Jamón Del Medio

169 Calamaro Pura Sangre Jamon Del Medio

La incontinencia artística de Andrés Calamaro ha salpicado en su último lanzamiento también a la edición de formatos en directo. De esta forma, se presenta en entregas separadas un jugoso y extenso DVD, Pura Sangre, que viene regalado de un compañero en audio que, lejos de ser una repetición, incluye los suficientes argumentos para resultar atractivo de forma independiente, y Jamón Del Medio, un disco ‘al uso’ en el que solo se repiten un par de temas del audio del ‘Pura Sangre’. En definitiva, un triple directo en el que encontramos a un Calamaro pletórico, más seguro que nunca de sus capacidades y con una naturalidad pasmosa. La frecuencia o cercanía parece restar valor a las cosas pero este doble directo confirma la solidez de la carrera de un artista mundial.

Lee el resto de esta entrada

Calamaro – Bohemio

80 Calamaro BohemioLos adjetivos para Andrés Calamaro después de 35 años de carrera, sea con distintas formaciones o en solitario, se acabaron hace mucho tiempo. Prolífico, excesivo, incontinente, rockero o tanguero, aguerrido o conquistador, lija o terciopelo… lo ha sido todo (y lo sigue siendo). Bohemio es su nueva entrega, un paso más en un camino extenso, que esta vez se presenta en formato ‘convencional’, un álbum de diez canciones que contrasta con esa verborrea musical ofrecida en soundclound en el pasado año o en internet hace más de una década, mucho antes de que se pusiera de moda o que la exigencia del mercado musical lo exigiera. Como ya hiciera en La Lengua Popular, Andrés ha contado de nuevo con Cachorro López (compañero en Los Abuelos De La Nada) a la producción, pero esta vez ahondando más en el sentimiento que en el colorista sonido obtenido en aquella entrega. Bohemio es un disco venenoso”, dijo en la presentación a medios. Nada hay más cierto.

Lee el resto de esta entrada