Siempre con un catálogo de lo más interesante y en su gran mayoría vinculado de una u otra forma al mundo de los rocanroles y la música, la familia de Desacorde Ediciones ha publicado recientemente dos libros de profunda y sesuda reflexión desde un punto de vista crítico hacia los valores imperantes de la sociedad (curiosa polisemia cuando el valor se mide en rentabilidad económica o material) y de los que avancé que traería reseña antes de que finalice el presente mes de julio. Tras escribir hace unos días de Punk Español. Gritando por la democracia en un estado posdictatorial que ya expresa el meollo y quid de la cuestión desde su propio título- no en vano se trata de una suerte de tesis doctoral de David Vila Diéguez donde analiza desde distintas posiciones y enfoques la influencia de la ‘cultura punk’, quizá sinónima con inconformista o contestaría, especialmente en los tiempos de la llamada Transición y sus efectos culturales-. Hoy es el turno para Lágrimas y sangre. El mundo visto con los ojos de un obrero, de David Cacchione que, dicho así, poca relación musical parece tener para aquellos que no sepan que es autor de las letras de algunas de las canciones del grupo italiano Banda Bassotti –además de manager- a quien, por cierto, siempre preferimos por estos lares bastante por encima de sus vecinos de Talco. Dos lecturas ‘fresquitas’ para estos calores y para tener siempre una mirada más amplia y diversa, porque casi nunca hay una verdad única.

David Cachhione nació el 19 de octubre de 1960 en Roma, ciudad en la que sigue viviendo y luchando. Agitador de profesión, hijo de la clase obrera y comunista, ha trabajado o sigue trabajando como albañil, mozo de carga y descarga, vendedor de periódicos, montador de andamios, portero, productor discográfico y barrendero. Miembro de Banda Bassotti y de la Caravana Antifascista, ha escrito Toda Una Vida, Memorias de un obrero internacionalista (Desacorde Ediciones, 2021), Lloviendo bombas. Una semana en Donbass (Desacorde Ediciones, 2022) y este Lágrimas y Sangre.

La sinopsis ni inquiere, «¿En qué se ha convertido el mundo en el que vivimos? ¿Cómo será el que dejaremos a nuestros hijos? A partir de estas preguntas, David Cacchione da forma a un glosario de la resistencia: nuevo, porque no hay nada más a la vanguardia que lo que hunde sus raíces en el sólido terreno de la historia del movimiento obrero. Palabras como «lucha de clase» se manifiestan con la increíble fuerza que contienen y que pueden liberar, mientras que términos como «memoria» y «solidaridad» reconectan los vínculos que unen en un único pueblo a todos aquellos que viven de su trabajo. Porque así es el mundo visto con los ojos de un obrero: un lugar en el que solo existe un límite, el que ahora y siempre ha separado al explotador del explotado».

Traducido por Bego Loza y con prólogo de Irene Zugasti, politóloga y periodista, («Lo que tienen en sus manos, queridos lectores, no es un libro cualquiera. No son unas memorias, ni una autobiografía, tampoco un ensayo político, ni poesía… es algo diferente, algo más, mucho más: lo que tienen estas páginas es el corazón de David. Lo que pasa entre su cabeza y sus manos, esa cabeza que nunca para de idear, y esas manos que nunca dejan de trabajar»), Lágrimas y Sangre es un intenso texto fragmentado en más de un centenar de capítulos (-a veces unas líneas, otros de desarrollo más largo-) donde aparecen infinitas preguntas y muchas respuestas sobre los ritmos impuestos en el mundo de hoy, donde nada es casual ni azaroso, en el que el ganador de cada sorteo cae siempre del mismo bando.

«No debemos perder la capacidad de hacernos mil preguntas incluso allí donde las respuestas permanecen ocultas».

Pensar es peligroso, por eso existen tantos estímulos vacuos para tenernos entretenidos. Este libro garantiza activar zonas dormidas, estimula reflexiones y cuestiona discursos imperantes. Y todo eso, siempre, es bueno.