El Hombre Gancho – Contigo Porque Me Matas (2000)
Fue hace poco más de un mes, cuando escribí la crítica remember de viernes de los cordobeses Hijos Del Hambre (antes Rockalcohol), cuando tomé consciencia de que la sección, que ha superado con creces las 300 entregas, tenía una ausencia que igual no es muy significativa para una gran mayoría de lectores, pero sí que lo es para mí en lo personal. Y aunque es cierto que podría citar más de cincuenta grupos de los que me tocan fibra y/o han sido tabla de salvación (o hundimiento) a lo largo de los años, sin duda El Hombre Gancho lo es y estaría de todas, todas, en esa relación. Los también cordobeses tienen a comienzos de la primera década del presente milenio una discografía arrebatadora, con canciones que se mueven en el rock castizo, canalla, con mucho de rumba rock, de tango argentino, de pasodoble, pero también, con el paso del disco, de medios tiempos bellamente armonizados, demostrando un manejo brutal de las melodías en todas sus facetas. Todo su ideario huele a derrota, a ausencia, a desgracia, a olvido, a despecho y a heridas abiertas, como la copa rota de Los Rodríguez. En esos terrenos noctívagos, debutaron con este Contigo Porque Me Matas (producido por Pancho Varona, por cierto), y siguieron de dulce con ¿A Santo De Qué? en 2001, con Navegantes en 2003 y con Si Tú Te Dejas en 2005. Cuatro disco inmensos que rezuman pasiones al límite, tanto en el desengaño como en el enamoramiento (Tras este disco, podéis pasar por el #Mis10de que les dediqué en su momento). Aquel cuarteto base lo formaban Maikel de la Riva a la voz y la guitarra, Pepe García Román en guitarra y voces, Juan Gamero Peña al bajo y Rafael Romero Rodríguez a la batería. Hoy brindamos por la pena y la desdicha de alta graduación con El Hombre Gancho. Ya tocaba.
El Hombre Gancho nace del crecimiento artístico que va experimentando Maikel de la Riva a su paso por bandas como Demonios En El Jardín o Malparaíso. Es en esta formación donde coincide con García Román, con quien emprende un papel más protagonista, dando salida a su certera manera de asaetear corazones.
El disco se grabó a finales de 1999 y salió publicado en marzo de 2000. Hay que recordar que eran buenos años para el rock acanallado, con toques de rumba y sonoridades latinas… pero con arreglos de rock. Por eso la apuesta de BMG Music Spain fue clara con los tres primeros discos. Un estreno que además, como apuntamos más arriba, venía avalado por la producción de Pancho Varona (que también regará el disco de coros), que también promueve colaboraciones como las de Jaime Asúa en algunos coros, Antonio García de Diego en el órgano y hasta del famoso percusionista Tino Di Geraldo y el guitarrista flamenco Juan Maya.
Con estos mimbres no es extraño que las hechuras de la banda sean las de un combo consagrado, grande, con las ideas muy claras. Esa seguridad sienta como un guante, claro está, a las letras de despecho y dolor que nutren el conjunto. Así se entienden frases como «Dispara, que no te veo la cara, dispara y apunta al corazón» que cierra el disco.
El inicio del álbum nos regala a la primera la canción con la que saltaron a todas las radios y televisiones donde había videoclips: “El Embustero”. Una rumba latina de sonoridad muy Los Rodríguez tanto en las guitarras rítmicas como en los coros, el tempo, sus teclados, un estribillo efectista en su redondez y una coda que termina de cerrar un tema rotundo, entre guitarra flamenca y metales. “Esperar y Esperar” nos recibe con una calorífica percusión (una de las excepciones la autoría de la letra, puesto que la firma Rafael Romero) y desplegar un bolerazo de rompe y rasga, etílico y cantinero, con segundas voces de Asúa y Varona.
“Calle Pena” retoma un marchamo similar al de “El Embustero” y vuelve a desplegar esa sonoridad de guitarra tan Ariel Rot. Un corte que se hace previsible pero muy disfrutable. Pero todavía lo será más “Tu Recuerdo Peor”. A una fantástica letra de Maikel se le suman aires entre el cabaret y el tango. Sin alardes, la emoción que transmite la voz en el puente y como se remata con el saxofón barítono en el estribillo es pura crema. Más madera con el ska a lo Madness de Córdoba de “Mi Tren”, que en la repetición de su ritmo acaba resultando de lo más satisfactoria. La primera parte del álbum se culmina con “El Hechicero”, otro bolero creciente, donde conjuras, maleficios y venenos siguen campando a sus anchas.
Para abrir la segunda parte nos encontraremos el rock vigorizado de funk de “El Amo De La Baranda”, con un derroche absoluto de chulería y desplante, con un estribillo corto y al pie. Así llegamos a otra gema indiscutible: “Prohibida” (y para que vean, ni siquiera está en #Mis10de). Un tango de tripas abiertas, como lo será en el siguiente álbum el pasodoble “Mira” o el “Déjame Vivir”. Por su parte, “La Flecha Envenenada” es un rock más al uso, de corte chamánico (la percusión de Moisés Porro ayuda) y mucho más grueso en distorsión, pedalera incluida, y progresión de acordes.
El rock más espídico viene de la mano de “Soledad”, que además de cierto toque fronterizo, destila algo de guasa con las voces coreando al más puro estilo coro griego. “El Contragolpe” vuelve a desempolvar el encanto de la canción romántica con el más purista de los boleros, género que El Hombre Gancho hace latir con la pulsión del rock. El broche llega con la mencionada “Dispara”, que nos despide con la misma cadencia ladina.
La banda regresó en 2014 con material nuevo y energías renovadas pero es evidente que nunca volvieron a los mismos niveles de popularidad. Les he visto en directo tan sólo una vez, entre 2006 y 2007, y aunque éramos poco más de treinta personas fue maravilloso. De alguna manera, siempre he llevado su puñal clavado y tienen mi respeto de por vida.
Lista de canciones – tracklist:
- El Embustero
- Esperar y Esperar
- Calle Pena
- Tu Recuerdo Peor
- Mi Tren
- El Hechicero
- El Amo De La Baranda
- Prohibida
- La Fecha Envenenada
- Soledad
- El Contragolpe
- Dispara
Publicado el julio 14, 2023 en Críticas Remember y etiquetado en Contigo Porque Me Matas, Críticas Remember, El Hombre Gancho. Guarda el enlace permanente. 1 comentario.




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