Shine, el grupo gallego que convirtió a Sasha Grey en un ‘cupcake impuro’

Publicado por elchayi

Para esta recta final de mes de julio me ha dado por traer temillas curiosos a la web. El lunes, hacíamos una interesante entrevista a Eme DJ, discjockey que colabora con frecuencia en causas sociales y a la que no le importó dar voz al problema de la salud mental en el mundo artístico. El martes dábamos un poco de luz al comando del grupo de punk enmascarado DaCat, que viene realizando una curiosa campaña de promoción en los últimos meses (mandamientos y programa electoral incluidos), antes de lo que será el lanzamiento definitivo de su primer disco (llevan tres singles) y quién sabe si su desenmascaramiento definitivo. Para ayer, miércoles, y hoy, he querido recuperar otros dos temas que en su día saqué en la extinta web de Rock Estatal. Ayer con la historia de El FarmaRockero, un farmacéutico que llegó a publicar un disco con consejos infantiles a ritmo de rock. Hoy, traigo otra historia que tiene ya sus diez añitos, y que viene de la mano de la ya extinta banda llamada Shine. La formación gallega realizó una singular promoción junto con la pastelería Sweet Place (hoy Bo Camino). Durante una semana, cada mes, los fans tenían que votar en las redes sociales su sabor favorito de entre varias opciones y el ganador sería elegido para ser el “cupcake impuro”, al que se le coloca el logo de la banda. Por ejemplo, de chocolate con licor de crema de orujo. El grupo llegó a interpretar su canción “Sasha Grey” dentro de la pastelería, un tema que a su vez también sirvió de videoclip, siendo reconocido en algún certamen local.

Shine era una banda de rock de A Coruña, formada por Álex Rapitis al bajo, Iago Blanco a la batería, percusión y coros, Miguel Thomas a la guitarra eléctrica principal y acústica y a los coros y Joel Varela a la voz, coros, guitarra rítmica y acústica. «Decimos rock a secas porque se nos da mal poner apellidos y etiquetas a nuestra propia música ya que en ella se reflejan nuestras influencias, que abarcan desde el pop o jazz más tranquilo, al metal con más fuerza. Después de alcanzar buenas críticas y reconocimiento con nuestro primer disco Ungravity (2008) nos lanzamos al segundo».

Shine lanzó su segundo disco Unpure, que trata sobre prejuicios y las impurezas, y cómo estas pueden hacernos más especiales si nos centramos en sus aspectos positivos. Salió tras un proceso de micromecenazgo (palabra que mola mucho más que crowdfunding) que recaudó 3.165 euros de los 2.800 solicitados. «Unpure es el nuevo disco de Shine, es rock, es impureza, es eclecticismo. Un pastiche heavy – melódico – rockero – progesivo – baladístico – popero –funky», apuntaban.

¿Por qué Unpure? Lo explicaba sí el guitarrista: «Unpure viene en parte de una parida que solté en una entrevista en la que comentaba que las “impurezas” son necesarias para que algo sea único. Todo eso me hace pensar en Shine. Tíos, somos impurísimos. Mezclamos estilos, no asumimos ningún prejuicio musical comúnmente aceptado, cantamos en inglés por mucho que nos lo reprochen, hacemos todo según nuestro criterio y eso nos lleva a recibir críticas como una de las de Madrid: “música difícil de entender, muy complicada” que era precedida por otra que rezaba “si os gusta Nirvana ir a verlos” ¡Jajaja! Podemos tener partes superheavys pero dicen que parecemos universitarios, y hacemos versiones tan dispares como para ir de Hoobastank a Megadeth. El nuevo disco va a ser la cosa más impura del mundo, un pastiche que va a ser la rehostia. Además, Unpure sirve para reivindicar el aspecto positivo de las impurezas, ¡no habría evolución si nadie se saliese del molde! Y como homenaje a toda la gente que ha malvivido por ser diferentes, sin que nadie supiese apreciar sus virtudes».

El vídeo oficial de “Sasha Grey” fue el primer single de su citado segundo disco Unpure y fue grabado y mezclado por Iago Blanco en Drum & Roll Studios. Se proclamó finalista en la sección oficial de Mejor Videoclip del Festival Primavera Do Cine. El videoclip está dirigido por Lara Capeáns y cuenta con Sheyla Fariña como protagonista (que después acabaría participando en la serie Acacias 38. La grabación tuvo lugar en diferentes sets entre A Coruña, Lugo y Sada. Tanto la canción como el videoclip pretenden ser una reflexión sobre los prejuicios y el modo en que a veces valoramos a las personas antes de conocerlas de verdad.

La banda dejó de dar señales en redes sociales en 2015 sin anunciar públicamente un adiós y, pasados seis años, en 2021, actualizaron foto de perfil y cabecera sin que se conozca tampoco si hay una vuelta real a la actividad.