Coincidiendo con la salida oficial de Génesis, el primer disco de los madrileños Ésolon, lanzan un nuevo videoclip “Al Límite”. De nuevo, otro contundente single con un estribillo pegadizo y un muro de guitarras inquebrantable, marca Ésolon. El video, que contiene una intrigante historia, se grabó en el maravilloso paraje de las Barracas de Burujón, en Toledo. La multicultural banda (tienen en sus filas a músicos de Bilbao, Santander, Buenos Aires, Toledo o Bogotá), asentada en el Barrio de San Blas (donde ensayan), de nuevo demuestra con “Al Límite”, que su primer recién publicado álbum Génesis va a sorprender a mucha gente, por su potente sonido, por unas composiciones directas que son dinamita pura: riffs afilados, unos estribillos que no olvidarás y una producción (en los Anhell Estudios por Ángel Muñoz), que no da tregua.  Ésolon es un quinteto formado por músicos que antes pasaron por bandas tan dispares como los recomendables A ContraVerso (a quien hicimos referencia aquí el pasado viernes), La Mano del Muerto, Seren Deep, Moai o S.P.A.M., Ésolon, en suma, presentan una aleación resistente de rock con tintes de metal e intensas letras poetizadas que mantienen una frescura elogiable por lo inusual de las distintas combinaciones e influencias. Os cuento un poco más dentro. Sea.

Ésolon viene conformado por Iván Keating como vocalista, David Malfaz al bajo, Federico Etchelecu y Samuel Merino a las guitarras y Arturo Flórez a la batería.

Efectivamente, estamos ante un rock afilado, a caballo entre el metal, el hard y un toque algo oscuro pero sin cargar tintas en lo que vendríamos a llamar ‘goticismo’. Una buena primera piedra de toque que ofrece un punto de partida ilusionante para próximas entregas y donde lucen las colaboraciones, que aquí refulgen, como Morti, que refuerza ese lado metalero y oscuro y Marcos Molina de Gritando En Silencio, al que sorprende escuchar en un registro sonoro algo distinto a la de su banda.

Se abre la lista con “En Un Péndulo”. «La letra enfrenta el pasado y el presente para evidenciar el paso del sufrimiento a la gloria gracias a la capacidad de reinvención y de superación personal que tenemos todas las personas. También nos habla de la importancia de ser conscientes de que pueden existir recaídas en esa compleja transición. Por esa razón, veréis en el videoclip escenas en blanco y negro que representan el “pasado” (melancolía) y escenas en color que representan el “presente” (superación)», nos explica la propia banda. Musicalmente, destaca la tremenda base rítmica y la lírica de las melodías vocales, arriesgadas e intensas.

En “Palabras De Lucifer” encontramos a Morti, que eleva la canción con su más que conocida solvencia, elegancia y prestancia. El tema, de ambientación bíblica, despliega su poderío dando paso a un break instrumental sinuoso y serpenteante con un gran solo. «Cuando la oscuridad parece infinita, recuerda que incluso la noche más larga siempre cede ante la luz» nos dice la banda sobre “Al Límite”, donde notamos ese aire más hard rockero y un estribillo más directo y conciso.  

“Abstinencia” pasa por ser uno de los cortes más netamente poéticos e introspectivos, angustioso y vívidos por momento, entre tinieblas y naufragios, sangre y tormento. Por su parte, “Seda y Hierro” ofrece uno de los compases y cadencias más ágiles y rítmicas. La entrada del solo de guitarra y el mantenimiento de su sonoridad en la coda nos lleva a terrenos más metálicos. “Catártica (Oda A La Música)” es la gran balada creciente del disco en su primera parte, abrazando delicadeza y sensibilidad en su primera parte, reservando la segunda a un crecimiento coral que explota en un gran desarrollo guitarrera y cercano al heavy metal. «Hay heridas que solo la música puede sanar. La canción es un viaje hacia la liberación emocional, donde el dolor se transforma en arte y la vulnerabilidad en fuerza. Que cada nota de esta canción sea un puente hacia tu paz interior», explican sobre el tema.

En el tercio final, “Noches De Sol” es un hard rock pesado entre lo urbano y stoner, completando así esa gran variedad y versatilidad comentada al inicio. Será en “Trileros” cuando hallemos ese cameo de Marcos Molina que saca su vertiente más aguerrida y combativa para un texto directo y barriquero entre un acompañamiento musical rudo y compacto.

El cierre lo echa “No Ha Muerto El Rock and Roll”. Toda una declaración de principios que deja a las claras que mientras existan bandas valientes y empecinadas como Ésolon, no se extinguirá. Que así sea.

Lista de canciones:

1. En Un Péndulo (ver aquí)
2. Palabras de Lucifer -con Morti (Skizzo, InMune, El Fantástico Hombre Bala,…)- (ver aquí)
3. Al Límite (ver aquí)
4. Abstinencia (ver aquí)
5. Seda y Hierro (ver aquí)
6. Catártica (Oda A La Música)  (ver aquí)
7. Noches de Sol (ver aquí)
8. Trileros -con Marcos Molina de Gritando en Silencio- (ver aquí)
9. No Ha Muerto el Rock & Roll (ver aquí)