Rupatrupa: «Un cantautor con una guitarra acústica puede ser más punki que un grupo haciendo un tema pop con mucha distorsión»

Además de tener la suerte de escuchar el disco al completo un mes y medio antes de su publicación, tal y como analizamos la pasada semana en una crítica en exclusiva, también tuve la oportunidad de hacer la primera entrevista promocional a Rupatrupa con su primer disco, La Utopía En Que Vivimos, desmenuzando con más detalle cada uno de los temas, haciendo una pequeña retrospectiva de su carrera y hablando someramente sobre el inminente inicio de su gira de presentación, que tiene confirmadas de una tacada las siguientes fechas: Cádiz (28-S), Sevilla (29-S), Málaga (30-S), Almería (1-O), Granada (5-O), Murcia (6-O), Alicante (7-O), Pamplona (19-O), Donosti (20-O), Bilbao (21-O), Logroño (22-O), A Coruña (26-O), Santiago de Compostela (27-O), Vigo (28-O), Oviedo (29-O), Barcelona (8-N), Valencia (9-N), Zaragoza (10-N), Albacete (11-N), Madrid (17-N), Las Palmas (30-N), Tenerife (15-D). También hay confirmada ya gira por Latinoamérica en las siguientes fechas y lugares: Bogotá (9-F), Medellín (16-F), Oriente (16-F), Pereira (18-F), Bucaramanga (21-F), Cali (23-F), Pasto (25-F), Quito (27-F), Ciudad de México (1-M), Guadalajara (3-M), Santiago de Chile (8-M) y Quilpué (9-M). Hay que celebrar que ocho años después de saltar a la vida pública, con maquetas en directo, tocar en la calle y muchos conciertos en boca a boca, llega su verdadero primer disco: La Utopía En Que Vivimos.

Buenas tardes. La Utopía En Que Vivimos viene a ser el cuarto gran trabajo completo tras ‘Directo En El Cuartito De La Lavadora’, ‘Directo En SDMA’ y tres años después del EP ‘A Solas’. ¿Contento con el resultado?

Siempre que digo que este realmente es el primer disco de estudio que tenemos. Mucha gente que está metida en el mundillo no lo entiende y me dicen no conozco a otra banda que haya conseguido las cosas que habéis conseguido vosotros y que tenga maquetas, porque realmente son maquetas. Contento sí, porque había muchas ganas de poder meterme en esto y grabar con calidad. Es verdad que me he metido en el trabajo de la producción y sé que hay cosas que se pueden mejorar pero he aprendido mucho. Lo primero es que se ha dilatado mucho en el tiempo porque esto lo empecé hace entre dos o tres años y como estaba metido en todos los procesos y a la vez teníamos las giras y demás, porque al final es lo que más te da de comer, he tenido que ir aparcándolo durante mucho tiempo. Hasta el punto de que llegó un momento en el que me desenamoré, me he tenido que enamorar del disco varias veces. Pero estoy contento. He aprendido un montón de cosas por error (risas) y bueno, esa cosa de escuchar el disco y decir esto lo hubiera hecho de otra manera, también en la gestión, pero puedo decir que estoy contento. Era el objetivo y el sonido que hemos conseguido era lo que más me rompía la cabeza, que fuese algo natural. Vivimos en un momento en el que todo es artificial, con muchos efectos y mucho tal y yo quería que sonase profesional sin sonar muy enlatado y creo que eso es lo que más me ha gustado.

Quizá precisamente sea una de las cosas más difíciles, el conseguir que lo que se hace en un estudio no pierda naturalidad, sobre todo en tu caso cuando te has movido siempre en sonidos más orgánicos y ‘de calle’. Quizá la dificultad fuese tener ese equilibrio entre la frescura de la inmediatez y un mayor cuidado y mimo de los detalles.

Cuando El Cuartito De La Lavadora lo hicimos cuando éramos tres personas empezando a tocar en la calle, que dejamos todo de lado por tocar en la calle porque nos iba bien, aunque también es cierto que vivíamos con muy poco y nos dimos cuenta que cuando la gente se paraba a escucharnos y nos echaba dinero, muchos preguntaban si teníamos un disco. En aquel momento no teníamos ni dinero ni tiempo como para meternos a grabar. Pedimos una mesa y una grabadora y una mesa a un par de amigos e hicimos aquello, pensábamos que no iba a tener más recorrido que ese, pero podíamos venderlo en la calle. Eso sí que no lo puedo escuchar a día de hoy porque está muy mal tocado, muy mal grabado, muy mal cantado… Pero es lo que hay. Está bien tener eso para no olvidarte de dónde vienes.

El de SDMA es del canal de YouTube de Sesión De Micros Abierta, que de hecho David trabaja con Rupatrupa, en parte del equipo de producción desde que empezó la relación con él y Rupatrupa creció mucho gracias a ese trabajo y a esa campaña en la que grabamos un montón de vídeos. Cuando fuimos a grabar la segunda vez, que grabamos como 17 vídeos en tres días, imagínate despertar por la mañana y pensar sitios para que no fuesen todos en el mismo salón. Como grabamos muchas canciones que no estaban en ningún lado, entonces le pedí coger los audios y digo, pues ya tenemos otro listo. Me encantaría haberme sentado en un estudio a hacerlo mejor pero no teníamos dinero ni tiempo ni la manera.

En A Solas tenía unas canciones como apartadas y lo grabé en mi casa anterior durante el confinamiento y siempre fue con la idea de grabarlas en un estudio. Así que una de las cosas era esa, que no me sonara a empaquetado, a plastificado.

¿Qué expectativas presentas con el álbum? ¿Se editará en formato físico? ¿En vinilo?

En físico va a salir seguro. Seguimos con el proceso de diseño con mi hermano, que muchos diseños y carteles los ha hecho él, lo hacemos en conjunto, él dibuja y maqueta. Primero vamos a sacar en plataformas y lo llevaremos en físico para la gira. Tenemos un pequeño problema con el vinilo y es que no cabe en uno normal. Hay mucha gente que quita un tema, pero a mí eso no me gusta. Veremos cuándo se puede hacer alguna tirada especial y tendrá que ser en doble. La putada es que es carísimo. La gente que se lo pueda comprar pues será casi tener una pequeña joya para ellos y que casi te están haciendo un favor a ti, porque solo fabricarlo es un dineral. Desde el minuto uno quería tenerlo en vinilo porque a mí me gusta tenerlos y es una buena manera de apoyar al proyecto y tu llevarte una joyita, pero no me plantee la duración en ningún momento y por unos cuantos minutos no entra en uno. Se hará.

A mí me sorprende mucho la increíble fuerza que tienen estas nuevas canciones sin haber usado la más mínima distorsión. Creo que es un buen ejemplo de que a veces hay más punk o más rock en la actitud y el mensaje que en el ruido por el ruido.

Claro. Por ejemplo cuando me enfrenté al tema de “Obedece”, que no sé ni cuándo empecé a hacerlo… Lo que dices. Yo empecé a tocar una guitarra eléctrica y sé perfectamente la fuerza que tiene con distorsión porque es así, pero cuando le di un girito a mi vida, cogí la guitarra española, empecé a hacer canciones, sin pensar en acabar viviendo de ello, me di cuenta de que en verdad la fuerza se puede dar por muchas razones. La puedes dar con la voz, con la velocidad, con un bombo a negras y eso levanta a un muerto. La puedes dar de muchas maneras y creo que hay mucho punk también en las letras. Puedes dar mucha distorsión y luego cantar un tema pop, que eso pasa también, lo hemos escuchado. Y puedes tener un cantautor solo con una guitarra y que sea muy punki. Si me dices que lo hemos conseguido, genial, porque era otro de los objetivos.

Aunque la esencia animal siempre ha estado ahí, es un disco con unas letras tremendamente implicadas. Son fruto de un hartazgo generalizado, un necesario toque de atención a navegantes que duermen mientras se hunde el barco.

De hecho hay canciones ahí que si no se han metido en otros discos o no se tocaban… Yo empecé a tocar solo en la calle, enseguida conocí a Nadir, que toca el acordeón, él me presentó a Matías que tocaba el saxo y empezamos como un trío. Pero había canciones, hay canciones que llevan hechas desde el principio, de cuando nos juntábamos y de que antes nos juntáramos como Rupatrupa y de que me fuera a la calle a tocar y de conocer a mis primeros compañeros. Pero cuando teníamos el trío veía que no teníamos las piezas suficientes para el puzle de cada canción, “La Cultura del Miedo” es una de ellas que estaba desde el principio pero yo no veía como hacerla en trío, no me quedaba bien. Sabía que tenía que haber más instrumentos con la percusión y demás y por eso cuando aposté por la banda ya la he metido. Ha pasado con otras muchas, que al final no es solo el cómo tocarlas en el trío sino que la temática no me pegaba del todo con los momentos que estábamos viviendo. Entonces cogí este disco como un venga, voy a hacer una cosa que aunque haya gente a la que no le guste, y sé perfectamente que habrá gente que le gusta Rupatrupa que yo sé que este disco no le va a gustar tanto como las otras canciones porque siempre que te metes más en política o temas sociales es más difícil que la gente conecte tanto, que pierdan el interés o que descubran que no piensan igual que tú. A mí me ha pasado con gente que me para a hablar. Y en este disco he querido juntar todo, que también hay canciones de amor pero sí que quería eso en el disco, dejar claro que iba a ser durillo, que no iba a ser divertido y la portada es una foto dura, pero la tenía en la cabeza desde que supe que el disco se iba a llamar de esa manera. No iba a ser un disco para pasarlo bien, se puede disfrutar, pero juntando todas esas canciones que no me pegaban en otros formatos.

Bueno, la diferencia es evidente. Creo que aunque tu público esté menos acostumbrado no es lo mismo un panfleto de exabruptos que el lenguaje poético que buscas, un tono más elevado. Van a seguir reconociendo al autor que tanto les gusta.

Ha habido gente que me ha dicho eso, que ha cambiado un montón pero que sigue estando la esencia detrás y eso siempre sienta bien porque tener esencia para alguien que es artista, que hace creación, es lo más importante. Puedes tener más o menos técnica, pero tener una esencia propia es importante y cuento con ello y creo que mucha gente lo va a reconocer en las canciones y le van a encantar, pero sé que a otra… La canción de amor es la que funciona y la canción política cuando escuece un poco no gusta tanto. Tenía la necesidad de hacer este disco así y creo que las canciones y la música hay que hacerla por la necesidad de expresar algo y te agradezco que digas que lo haya hecho con buen lenguaje. Le doy muchas vueltas a eso.

Repaso canción a canción:

Esperando En El Monte Gurugú. Toma el título del monte marroquí de connotaciones bíblicas, de lo que es para los inmigrantes que intentan saltar la valla su paraíso, entrar a España. De ahí la melodía, entiendo.

En este disco una de las cosas con las que he tardado tanto, yo no tengo ni idea de teoría musical pero me ha dado por hacer arreglos de cuerda, los he hecho yo y esa fue una de las primeras cosas que compuse para cuarteto de cuerda y tenía eso en la cabeza. Quería que hablase de ese tema y que fuese la portada, que tuviera esa temática. Es algo que muy poca gente conoce, que conocí de cerca en Melilla y es bastante duro saber que mucha gente desconoce que hay tres vallas con cuchillas. Se enteran allí y gente que pasa allí muchos años esperando en una situación muy chunga.

El Miedo De Los Tontos. Me encanta el diálogo de acordeón, percusión y una letra brutal… El miedo de los tontos no es otra cosa que la xenofobia.

Ese tema lleva hecho desde que trabajé allí en Melilla y es que es lo que yo veía. Salía de este centro saliendo con una sonrisa de oreja a oreja y te ibas a cualquier bar en Melilla, que es muy muy pequeño, y veías mucho racismo y mucha xenofobia, muchas culturas mezcladas que te lo intentan vender como un ejemplo de multiculturalidad y lo que hay es una bomba de relojería realmente. Es lo que veía todo el rato. Había tonterías tan bestias como que decían la gente que estaba en ese centro tenía una paga al mes de mil euros y eso se creía, y era una barbaridad. Era muy duro. Veía eso. Mucho miedo y muchos tontos.  Percusión africana de Tiago, me pegaba de algo así, se pegó un trabajo increíble.

Sin duda el bulo encuentra en la estupidez una velocidad de propagación terrible. Comando Antivandálico Pero Violento, una rumba con aires de jazz y ese saxo alto.

Desde el principio era una rumba. Desde que empecé a tocar con Germán, él es muy flamenco y yo tenía una idea en la cabeza que era incapaz de ejecutar y, claro, en cuanto la puse en sus manos me encanta como lo hizo. La idea era una rumba pero Tiago, que es el percusionista, es brasileño. Vimos la posibilidad de meter un cajón pero era lo evidente y no sé si fue él o yo que dijimos y un pandero brasileño… Y de repente cuando estábamos en el estudio metimos más elementos al final es una rumba con cosas de jazz pero toda la base es brasileña y a mí me encantó porque le da ese aire de sueño, ya que esa canción habla de una noche que pasó de verdad y la recuerdo como fue de bonito y de no acordarme muy bien.

La música brasileña siempre nebuliza los márgenes y le da ese toque flotante, claro. La Cultura Del Miedo, juegas con dos tempos, uno más lírico y otro más intenso y crudo.

Dualidad. Es algo que a mí siempre me ha gustado y de hecho me ha gustado tanto, tanto que una vez, el mismo hermano, que él estudió música, yo no, me dice cosas de vez en cuando y me comentó que tenía que dejar de utilizar ese recurso. No puedes siempre empezar y subir… pero hay canciones que piden eso y en esta no solo me pedía subir sino que hay dos partes subiendo y esa de las canciones que están hechas desde que tocábamos al principio en trío, pero nunca la tenía en mi cabeza para arreglarla porque sabía que necesitaba una banda. Cuando la tuvimos me encantó porque era lo que tenía en mente.

En Guerra es una revisión de un tema de A Solas. Plasma muy bien tu gusto por el cantor de escuela latinoamericana.

Es de esas canciones que me salieron muy rápido cuando la compuse, algunas se atraviesan y tardo años en acabarla, pero esta no. Me gustó por lo directa y lo concisa y sé que es un tema que sé que no funciona mucho en los directos, hace tiempo que no la toco, sé que no es una canción que tenga muchas reproducciones ni que vaya a enganchar a la gente, sin embargo, por la temática del disco, me apetecía tener un detalle con la propia canción y dejarla mejor hecha. Creo que tiene que ver con el concepto, aunque sepa que no va a ser de las más celebradas creo que era justo que estuviera.

Obedece. Es una de las más sorprendentes, donde hablamos de casi un doble bombo y una actitud muy punk, pero también muy lírica. Dan muestra del salto compositivo del álbum.

Es de las que no sé ni cuántos años he tardado en hacerla. Siempre me costaba imaginarla en Rupatrupa por lo que hablamos, porque lo primero que te pide cuando coges la guitarra y te sale algo así es darle una guitarra eléctrica, más caña, distorsión y un doble bombo. Yo hago la composición dándole vueltas y vueltas y vueltas y empecé a tener una estructura que me gustaba mucho y vi que se podía, así que empecé a hacer los arreglos de los distintos instrumentos. Al principio pensaba que la gente se iba a pensar qué hace Rupatrupa tocando esto pero me he encontrado con mucha gente que le encanta. Para mí es de mis canciones favoritas de las que he hecho, de las que más orgulloso estoy, me encanta la letra, me encanta tocarla, me encanta escucharla… Creo que como estructura, que le doy mucha importancia a la estructura y a la dinámica, creo que está muy bien hecha. Y es muy punki, que de primeras extraña y hay gente a la que no le gusta mucho, porque tienen a Rupatrupa por otros estilos, y yo estoy encantado. De las mejores canciones que he hecho.

Interludio Para Mi Julita. Tras Carta Abierta Para Adrián, vuelves a un tema con dedicatoria. Cortita y sin forzar, sin que se desnaturalice el ejercicio artístico.

Intento respetar eso mucho porque creo que al final se nota. Noto cuando escucho algo y ves que esa canción se ha hecho con un propósito concreto, como cuando escuchamos canciones comerciales de la radio, que en ese caso el estribillo lo escuchas cinco o seis veces, que sabes que a nivel musical no tiene mucho sentido pero para que a ti se machaque la cabeza y se te quede pegado como un chicle tiene ese sentido. Entonces yo siempre intento eso. Hablaba de eso con Alba que es la actual saxofonista y justo hablábamos de los estribillos y al final muchas canciones de las que hago ni tienen estribillo. De pequeño a mí siempre me encantaban las estrofas y me parecía que cuando llegaba el estribillo era algo súper evidente, pegajoso y cansino, que hay muchos estribillos guays en el mundo, pero como que me fastidiaba que hubiese estribillo en las canciones, pues mira esta salió así. Por supuesto que tú mismo te haces preguntas en cada fase de una canción (escribiendo, grabando… todo el rato), y siempre dudas, dudo mucho de lo que estoy haciendo porque pienso que no estoy seguro de lo que hago. Al final comparas con cosas que conoces, eso no se puede evitar, así es como creamos, una mezcla de las cosas que conocemos y las transformamos en algo propio. Todo lo intentas llevar a algo que conoces y a un punto cómodo, pero cuando te olvidas de eso, es cuando pueden nacer cosas así, que te encuentres temas largos o cortos. Cuando tienes la necesidad de no seguir ninguna norma, creo que es importante a la hora de crear.

Empecé a escribirla cuando ya estábamos en proceso de grabación del disco. Me salió así tan cortita y tan todo que la quise grabar ya. Hasta el arreglo y todo me salió muy fácil, rápido. Muy contento de la canción porque es de esas de cuando yo escucho de otra persona me molesta que dure poco, pero que cuando la estaba haciendo yo mismo buscaba cómo alargarla y ya al par de días dije… si es que no hace falta alargarla, la quiero así. Este disco es así, hay canciones como esta que no dura ni un minuto y medio y hay otra de nueve minutos.  

La Colombia. Reconozco que me eriza la piel. Imagino que nace de un viaje especial y es un canto de amor a la tierra, con locución de Francia Márquez.

Tenemos la suerte de tener muchísima gente que nos sigue en Latinoamérica. Colombia fue el primer sitio que visitamos en trío y fue un poco a lo loco. Ahora no es que viajemos como estrellas pero lo tenemos todo más organizado. Vino mi hermano que iba de road manager sin tener ni idea de qué íbamos a encontrarnos. Y además de encontrarnos un fenómeno fan que no esperábamos y que te diría que afortunadamente no tenemos en España, que allí es precioso pero a veces muy intenso y un poco loco en algunos sentidos, pero encuentras un país que a mí me dejó boquiabierto desde el minuto uno. La gente, los sitios… Increíble. Nos dieron mucho amor desde el minuto uno, fue en 2018, y fue cuando empecé a escribir esa canción. Tardé en acabarla pero muy contento con el resultado. Hay temas que algunos compañeros han participado más o menos, pero esa te puedo decir que casi al 100% la he compuesto yo de arriba abajo y estoy muy contento de lo que hice porque me emociona escucharla. Era una cosa, como un regalo que quería hacerle a la gente de Colombia, que tanto nos ha querido y que tanto nos ha apoyado. No la planteé como eso pero cuando llegué allí empecé a escribir y seguí y cuando volví la segunda vez volví a escribir cosas y luego ya la terminé. Creo que define mucho la parte bonita. “Colombia me dio su paz escondida en las trincheras” era un poco explicar el que cuando tú vienes de España tiene unas idea de Colombia, que te hablan de la violencia, que existe y existió muchísimo, que te vas y tu familia te dice ten cuidado… pero lo que recibimos allí fue todo el amor, no me han dado más amor en mi vida. No entendíamos cómo podíamos estar cruzando el mundo y que conociese tanto nuestras canciones que cantara los temas de arriba abajo en los conciertos. Era muy loco pensar que gente con unas historias y unas vidas durísimas nos entregaran tanto a nosotros que no nos conocían, que no hemos hecho nada. De eso va la canción. Un homenaje que se merecen.

La locución es un poco una putada, esa mujer es Francia Márquez. La conocí porque era una luchadora por el medio ambiente brutal y ese es un fragmento de un discurso que dio recogiendo el Premio Ambiental Goldman 2018, el más que hay a nivel mundial de defensa del medio ambiente. Cuando metí eso yo no sabía que ella estaba metida en política. Sigo defendiéndola y ha llegado a ser la primera vicepresidenta mujer y negra de Colombia. El problema, cuando te metes en temas políticos y sociales te vas encontrando más gente que digamos te muestra rechazo. Todo muy guay pero por qué metiste a esta señora. Si esta señora no se lo merece, ¿quién? Que ha sufrido no sé cuántos tiroteos y ha seguido haciendo su trabajo. Cuanto más te metes en esos temas más fácil es que a la gente le chirríe o tenga un rechazo pero creo que se lo merece y por eso está ahí.

A Dos Palmos Del Suelo. Una ópera rock de nueve minutos, para mí la más ambiciosa hasta la fecha. Con muchas cosas de Robe… y también de Extremoduro con esa referencia al ‘Qué Sonrisa Tan Rara’. Es un autor muy presente en tu obra incluso en los arreglos.

Seguro que es de los temas que más tiene de Robe. Este tema ha costado muchísimo. No sé ni cuántos años tardé en terminarlo. Lo empecé a escribir con 18, 19 o 20 años, tengo 34. Me atasqué en una parte… Yo en mi cabeza entonces no tenía para nada en la mente vivir de la música, tocaba y me gustaba. Estoy súper orgulloso. Por supuesto tiene mucho de Robe, mucho de Extremoduro… El cambio ese como un ritmo medio latino pero sin ser latino con la batería eso es de Extremoduro al cien por cien. Y sí, me gusta mucho lo que has dicho. Es una ópera rock sin ser rock. Tiene un ritmo de rumba, un par de toques medio latinos, pero no llega a ser nada cañero. Lo es pero sin utilizar los recursos habituales para dar caña. Nos costó mucho pero estoy muy contento, me encanta. Será el focus track del disco, que la distribuidora nos recomendaba que fuese otro tema por la duración. Esto lo tiene que escuchar editores para ver si entráis en las listas y tal e igual es un poco difícil, pero teníamos claro que si no podía ser ninguno de los que ya ha salido en YouTube y demás, de los que ya han sido single, sin duda, aunque se pudiera otro. Me alegro que te guste y que a ver si la gente aguanta hasta antes de que termine. 

La gente que se acerca a tu música o a la gente que escucha a Robe se da por hecho que tienen cierto criterio para saber diferenciar y apreciar desarrollos más largos.

La canción tiene una historia y le preguntaba a mis compañeros y gente cercana, creéis que sobra algo. Porque a mí me encanta como está, si la canción me sigue pidiendo voy a seguir haciendo y cuando vi lo que duraba hasta yo mismo… Lo mismo es lo típico que a mí me está encantando y la escucha alguien de fuera a los tres minutos dice qué coñazo, te ha sobrado todo esto. De hecho hay una parte instrumental que hace el acordeón con el saxo que se entrelazan todos los instrumentos que había compañeros que decían de hacerlo más corto y dije que no, que eso era así como había salido. Que tenía que durar eso. Si me ha salido así no me gusta cortar las cosas por el simple hecho de que no aburre. Si aburre será porque no es atractivo en general.

Si una canción aburre, lo hace dure tres o quince minutos.

Eso es. A mí me ha pasado con canciones, que llega un momento que dices si solo lleva dos minutos. Claro que sí, lo veo así.

La Utopía En Que Vivimos. Intensa e inquietante. Hay una imagen que hiela la sangre, la de “mojado en sal un cuerpo de niña flotando en el mar”.

Estaba en el disco de SDMA yo solo con la guitarra y creo que era canción del rollo cantautor que he llevado, tengo canciones de cantautor y otras que no y esta es de las que sí que es de cantautor de libro, de arriba abajo y se merecía una grabación y una producción mejor. Me ha costado sudor y lágrimas pero que me encanta cómo ha quedado. Era una mezcla de muchas noticias que había ido leyendo y esa parte habla de que se hizo famoso, con el niño, y también así. Estaba justo con la canción y… es duro, pero pasa mucho, y lo que no sabemos y no nos enteramos.

Tonada De Las Campesinas. Timple y bombo legüero. Agua, tierra, folclore isleño, poema de Nicolás Estévanez.

Yo vivo en Canarias, en Tenerife. Empecé aquí, me fue de Madrid con 25 años, pasé por Melilla porque tengo allí familia, mi madre es de allí y una prima mía vino a estudiar. Llegué a Tenerife y me lancé a la calle a tocar. No me daba vergüenza y eso que tenía mucho miedo escénico pero lo superé porque decía si aquí no me conoce nada y me dio un poco igual. Rupatrupa ha nacido y crecido aquí en Canarias y era un poco un homenaje a toda esa gente que trabaja el campo. Todo el mundo sabe que es una mierda y que no valoramos, a la gente que nos da de comer. Aquí en Canarias es muy duro por la orografía, por muchas razones y salió esa canción. El coro que hay ahí, la letra, la escribí nos estaban llevando después de concierto que hicimos en La Palma, hace un par de años, con Matías todavía. Nos llevaban al aeropuerto para volver, la cascada de nubes es algo que aquí pasa mucho pero en La Palma es muy exagerado, ves el movimiento de las nubes cayendo. Cuando subes al Teide se ve mucho también. Llevaba una resaca brutal e hice un gran esfuerzo para sacar el móvil y grabar, me salió eso y habla justo de La Palma. Ese coro es de La Palma. Metimos el timple porque tenía que estar.

El Vals Del Barquero. Como amante de la canción francesa y ese aire de acordeón y tempo de vals… Me parece una obra de arte.

Si te fijas es la única canción que no tiene una guitarra y la compuse con guitarra y voz. Tardé tanto por eso, porque dije no voy a fijar límites y lo que me venga a la cabeza. Eso hizo que todo se complicase mucho. Fue la primera vez que hice una adaptación de hacer algo en guitarra y pasarlo a cuarteto de cuerda y me he peleado con esos arreglos incluso de a veces querer llorar. De tirarme tardes y tardes y darle vueltas, salir a respirar… Ahora la escucho y me encanta. Igual que soy un amante de Extremoduro, de Robe y de Metallica, que también hay cosas por ahí en Obedece, he sido muy fan de Yann Tiersen y ahí está en todo el tema, sobre todo la parte final, que tenía claro que iba a ser ese, con ese fade out tan largo, como regalándome, pues mira ya está, lo que me salga. Ha sido una canción que me guste. No sé si algún día se podrá tocar en directo con un cuarteto pero quería tenerla plasmada de una manera que yo la escuchase y dijese me gusta y me apetece, me llama escucharla.

En cuanto a la gira, está muy planificada, a la vieja usanza, agrupando muchas fechas juntas en ciudades cercanas en la misma semana. Desde final de septiembre a diciembre en España y febrero y marzo en Latinoamérica.

Todas las fechas que hay ahora mismo son con la banda y, claro, al hacerlo de esa manera a la vieja usanza juntando el máximo de conciertos posibles es porque venimos desde Canarias, nos metemos en una autocaravana seis personas y a comer kilómetros como locos. Lo dividimos un poco, juntamos dos fines de semana, una batalla increíble, volvemos a casa, y luego a la semana o semana y algo, de nuevo avión y autocaravana. Así tenemos dos y luego hay un último con Barcelona y otro con Madrid porque no cuadró otras fechas. Y terminamos en casa en Las Palmas y Tenerife. Es muy dura la gira cuando vamos todos así pero no vemos otra manera de hacerla. Le he dado mil vueltas y es como se tiene que hacer.

¿Qué va a encontrarse el público?

En cuanto a qué se va a encontrar la gente, hay canciones del disco nuevo, por supuesto, de hecho hay canciones que llevamos tocando desde hace tiempo aunque no estuviesen grabadas, vamos a añadir alguna más, pero no vamos a tocar el disco entero para nada. Nunca me ha gustado en otras bandas cuando vas a verlas y cantan el disco entero, a no ser que sea un concierto de tres horas, que puedes hacerlo, pero en un concierto de algo menos de dos horas pues hemos quitado alguna de siempre, hemos juntado estas… Siempre pensando mucho en qué nos apetece tocar pero sobre todo en qué quiere escuchar la gente. Y yo sé que la gente hay canciones que les puede aburrir más, aunque alguien la puede echar de menos porque para gustos los colores, pero que el que paga la entrada se vaya con las canciones que conoce y que le gusten e intentar agradar a todo el mundo. Siempre va a haber alguien que diga que falto tal pero eso me lo tomo como algo bueno, significa que hay más canciones que gustan. Es un repertorio lo tenemos en veinte canciones, aunque hay algunas de 7, 8, 9 minutos, que te comes el tiempo volado. Nos rompemos mucho la cabeza con las canciones que elegimos e igual que lo hago con los discos me parece muy importante la estructura y la dinámica, que la gente se vaya del concierto con ganas de más. Si te vas de un sitio diciendo menos mal que me voy, qué dolor de cabeza, eso ya… Intento que la mayoría se vaya con la sensación del se me ha hecho corto aunque sea dos horas.

Espero que el trabajo dé sus frutos, tanto con el disco como con la gira.

Ha sido un trabajo que me ha dado muchos dolores de cabeza y muchos momentos tristes, porque se ha enquistado y ha sido demasiado largo y he cometido muchos errores, pero de ellos se aprende y si por lo menos queda un disco que se puede escuchar y que a la gente le atrae, que le haga pensar, que te atraviese un poco, que no solo esté de fondo, pues objetivo conseguido.

Publicado el septiembre 19, 2023 en Actualidad y etiquetado en , , , . Guarda el enlace permanente. 1 comentario.

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