La heterogeneidad es uno de los grandes baluartes dentro del cartel de The Juergas Rock Festival y, sin lugar a dudas, la lista de actuaciones del viernes, 1 de agosto, el tercer día de los cuatro, es buena prueba de ello. Desde la mezcla de rumba, rock y electrónica transgresiva de Sanguijuelas del Guadiana y el punk corrosivo y humorístico de Loncha Velasco del Escenario Agustico, al punk de la vieja escuela de Manifa, el rudo callejero y afilado de Kaos Urbano, el rock hardcoreteado, poético y emocional de Los De Marras, la electrónica rapera, ravera y oscura de Narco, el humor deslenguado de Lendakaris Muertos, la propia mezcolanza multirregional y sonora de Boikot y el cierre discotequero de Dj Trapella en el escenario principal. Sobrevivimos al tercer asalto como pudimos. Admitámoslo, es complicado estar en todos de principio a fin, más todavía con unas temperaturas tan altas y cuatro días de mandanga. Y estaba empezando a incubar. (Fotos: The Juergas Rock Festival – Daniel Cruz)

Sanguijuelas del Guadiana sigue a pico y pala construyendo unas bases que le convierten en una de las más agradables sorpresas musicales de los dos últimos años, en los que van a acumular casi un centenar de bolos de todo pelaje, de pequeños a grandes. Tocando en salas para pocas personas, a horas cualesquiera de los escenarios menores de festivales, o sorprendiendo a públicos tan diversos como los de La Raíz o Camela con la misma caradura y respeto. Revolá ha sido su primer disco, que presidió todo el concierto, terriblemente pegajoso, con melodías y estribillos que parece que ya has escuchado pero a los que necesitas volver. Rock rumbero (Estopa) de querencia poética – transgresiva (Extremoduro, Albertucho, Marea, Poncho), rumba y tangos inmediatos de corte pseudokinki con los ramalazos ochenteros con pátinas de funk (Los Chunguitos –a quienes versionan-), efectos y arreglos electrónicos en las bases y un apego a la ruralidad que les hace sonar como un tiro.La plaga de Sanguijuelas del Guadiana ya está aquí a ritmo de “100 Amapolas”, “Llevadme a Mi Extremadura”, “Revolá”, versiones de Estopa y Los Chunguitos y una autenticidad plena. Bienvenida sea y el año que viene a abrir el recinto grande.

Loncha Velasco es un grupo malagueño nacido en 2017 que apuesta por ser una de las bandas con el directo más potente de la escena nacional y a ocupar las horas más fiesteras de los festivales y salas del panorama… Que bandas como Narco, Non Servium o Def Con Dos hayan colaborado con ellos dan fe de la madera de buena cuña. Sea como sea y dada la amplia jornada laboral, tuve que sacrificar su actuación por lo que me apunto la deuda (como hago siempre) ya sea para la próxima oportunidad o para hacer crítica de su próximo disco. Os dejo foto para dar testimonio de su paso por Adra.

Manifa es una de esas bandas ‘agradecidas’ para cualquier festival. Un valor de fiabilidad estable que garantiza un sonido de calidad, buenas melodías punk, actitud desafiante y una dinámica que hace que la actuación no decaiga en ningún momento. Y poco a poco esa semilla se ha ido extendiendo como dan fe esta misma temporada de festivales como Kalagurri Rock, Alko Rock, Trasankos Rock, Astudillo Punk Rock, VdB Rock, Boina Rock o el Alterna Festival y lo harán también en Rabolagartija, Muxismo o Duberel… The Juergas Rock Festival era una parada más en ese camino y ejercieron como viene siendo habitual. Desde Repélega en Portugalete y con toda esa crudeza que se mueve entre la corrosión irónica de Evaristo (ellos mismos lo reconocen en una de sus pegatinas) y la teatralidad desbordante de El Noi del Sucre, muerden rápido desde el arranque habitual de los últimos tiempos como sus “Asesinos de Rock and Roll”, pasando por “Bandera Negra”, “Dispara”, “Con El Gulag Se Vivía Mejor”. No faltaron las habituales “Dios Salve Al Viña”, “A Las Mariscadas”, “Cristales Rotos”, “Rebelión” o “Incendiaremos La Noche”.

Anda Kaos Urbano terminado de mezclar y preparar tres singles inéditos además de planificar la celebración por todo lo alto –vayan afilando colmillos- de su trigésimo aniversario. No es poca cosa: 30 años al pie del cañón. Los madrileños nacieron en 1995, recogiendo en una banda de amigos todas las inquietudes de una juventud de extrarradio oprimida y apresada, “Años Salvajes” y “Suburbiales”, como cantaron. Lo que a buen seguro no podrían imaginar es que, pasadas casi tres décadas, serían una de las bandas referenciales del rock combativo. Sin más técnica que la del coraje y la furia, esa que se riega con tragos de street punk y que patea los ritmos con cadencia del oi y la potencia del hardcore. Eso sí, igual que los grupos de rock poeta evolucionan con el paso de los años aminorando la velocidad y atemperando las formas en sus carreras solistas, en el caso de bandas como Kaos Urbano la evolución viene de la mano de una mayor ‘accesibilidad’ en el envoltorio. También ayuda la mejora del sonido, la democratización de los medios tecnológicos… y el aprendizaje. Lo que antes sonaba a rayos, a corteza, a rudo, ahora suena más empacado, pulcro, melódico. Nadie les ha regalado nada para llegar donde están. Incluso, todo lo contrario. El destino, siempre tan puñetero, les ha puesto zancadillas en numerosas ocasiones. Pero Kaos Urbano puede tropezar, nunca caer, con esas balas perdidas que cortan el aire en la “Larga Vida Al Oi!”.

Siempre es un acierto contar con Los De Marras a la hora de confeccionar un cartel. Sin duda que su rock a tres guitarras, a veces más poético y lírico, otras más hardcore y apunkado, es recibido con pasión por parte de un público que hace años que lo situó en el escalafón de la primera línea dentro de esta escena. Lo que ha sido un doble acierto este año es ‘adelantarles’ el horario ya que acumulaban tres ediciones consecutivas actuando entre las dos y tres de la madrugada. Creo que les sienta mucho mejor –a público y banda- un horario más razonable como el que han disfrutado en esta edición del Juergas, que se rindió a un repertorio de temas que ya son clásicos (“Escápate”, “Sexo En La Calle”, “Malabares”, “Ruido”, “Hoy” o “A Tu Vera”) con otros de nuevo cuño que se han agrupado recientemente en ese suculento EP Resumiendo, del que sonaría temas como “La Oca” o “Me Ajuego”, contra las casas de apuestas. Agus y los suyos siguen sonando como un tiro, habiendo sabido madurar su propio éxito con trabajo y compromiso, como llevan haciendo, por otra parte, durante toda su vida artística. En el Juergas desde ‘su debut’ en Almería en 2017, como recordaron, hasta hoy. No es placer, es necesidad. Por cierto, sería bueno que hicieran público esa remezcla discotequera con la que se despidieron del respetable.

Después de haber rodado y rodado sin parar desde hace no sé cuánto –y porque la pandemia supuso un parón ‘obligado’- Narco se ha tomado este 2025 como un ‘semi-respiro’ con solo siete únicos conciertos. A Candeloria, Alterna, Pirata Fest, Ribaforada… Y The Juergas Rock. Un festival que les ha tenido ley desde el principio de los tiempos. Dos ejemplos: fueron junto a Gatillazo y Porretas una de las tres bandas no locales de la primera edición en el pequeño pueblo de Fines; y fue uno de los primeros lugares donde actuaron tras la salida de Vikingo en 2019. Como ocurrió con Los De Marras, también se les adelantó un tanto su horario habitual y el público respondió mucho más entero y participativo a ese mezcla explosiva de metal, punk, rave y bandarrismo marca de la casa que aunque ya no sorprende ni impacta como antaño, sigue siendo una maquinaria que funciona entre la perfección y el caos… Reforzando esa sensación peligrosa, alucinógena y espídica que promueven temas infalibles en festivales como las iniciales “Siempre Enmarronao”, “El Trapichero” o “No Nos Van A Echar”, pasando por “Suicídate” como esa acerada y oscurísima “Lamprea”. El cierre, entre papelinas “Yoni El Robot” en pleno “Chispazo”. En lo personal, me llegaron bastante más que en las dos anteriores.

Quienes llevan un año intenso –y lo que les queda- son Lendakaris Muertos. No en vano ya anunciaron que tras el final de gira –previsto para el 27 de diciembre en La Riviera de Madrid- se van a tomar un descanso indefinido… Está siendo este 2025 una bola extra de la celebración del vigésimo aniversario y como tal ejercieron responsablemente (¿?) con lo más esperado del repertorio, siempre kilométrico y descabalgado. Quien les ha visto en directo lo sabe, casi da igual lo que canten porque el concierto se nutre y vibra en las caras de Aitor en cada tema, el motor ingobernable de Potxeta en la batería y ese lustre que da el regreso de Asier a la guitarra, junto con Jokin al bajo. Temas como “El Último Txakurra”, “Fuimos Ikastoleros”, “Pasau De Rosca” o “Detector de Gilipolleces” perviven entre los menos ‘arrugados’ de “Tormenta de Mierda”, “Pablo Echenique” o “Se Dice Taitánic” –uno de mis favoritos-. Sonó especialmente propicio el “Cómeme La Franja de Gaza” antes de los estribillos de carácter internacionalista de “Héroes de la Clase Obrera” o “Veteranos de la KaleBorroka”. La discotequera “Húngara Chúngara” y la mención a la selección de fútbol femenina en “Gora España” dieron paso a un aquelarre final donde no faltó la ambivalente “Modo Dios” – “Modo Diosa” y el final con “Oso Panda”. Quizá esta vez los parones deslucieron más que en otras ocasiones.

El “ska-punk-rock-balkansound-originaria de Madrid”, como dice su autodefinición, de Boikot cogió el relevo en la madrugada del viernes, confirmando lo que se veía ya sobre el papel: que el viernes iba a ser uno de los días más ‘exigentes’ de la maratón de cuatro días. El combo hace tiempo que se ha situado en el podio de los festivales, dejando a un lado la edición de discos (ojo, el último, Lágrimas de Rabia, data de 2012 teniendo en cuenta que lo siguiente ha sido un directo o la revisión acústico-balcánica en estudio) más allá de algún nuevo single sin tampoco agobiarse demasiado con la periodicidad. Por eso es habitual que las iniciales “NaítaNa” e “Inés”, “Pueblos”, “Despaldas Al Mundo” o la recuperada “Mentiras” sigan en el repertorio junto con las ‘más recientes’ “Alma Guerrera” o “Hablarán Las Calles”. La versión de “Kualkier Día” de Piperrak, “Korsakov” o “Grito En Alto” siguen siendo infalibles. Llámenme iluso pero a mí me gustaría volver a tener un disco completo de nuevos temas de Boikot para que la llama luzca renovada en la segunda mitad de esta década. Motivos a los que cantar, desde luego, no faltan.

DJ Trapella fue la encargada de cerrar a los platos la jornada del viernes. Una sesión desde los platos para una joven que lleva tiempo trabajando abiertamente por los derechos LGBTQ+ y con identidad de género disidente, completando así el trabajo a los platos que hace con Tribade. Os dejamos foto como testimonio de su paso por Adra.

Quedaba un asalto más.

Aquí linkamos el resto:

The Juergas Rock Festival 2025. Miércoles, 30 de julio

The Juergas Rock Festival 2025. Jueves, 31 de julio

The Juergas Rock Festival 2025. Sábado, 2 de agosto