“No estoy de acuerdo con lo que usted dice, pero lucharé para que pueda decirlo libremente”.
Ha vuelto a ocurrir. La caza de brujas realizada contra Soziedad Alkohólika, que terminó por sentarlos en el banquillo del juzgado en 2006, parece no terminar. Siempre vuelve una y otra vez. “El concierto previsto para este viernes 18 de enero en la sala Rockitchen de Madrid queda suspendido definitivamente. Después de los tres últimos intentos de actuar en Madrid, los promotores del concierto nos comunican que debido a las amenazas y presiones policiales recibidas por las salas Revirock, Penelope y Rockitchen, va a ser imposible que actuemos de momento en Madrid”, reza la banda en un comunicado. Estamos ante un nuevo ataque contra la libertad de expresión inadmisible, sobre todo después de que la Justicia…

les diera la razón. El 22 de noviembre de 2006 los componentes de Soziedad Alkohólika y su manager fueron absueltos por la Sala Primera de lo Penal de la Audiencia Nacional del delito de enaltecimiento del terrorismo. ¿Entonces? ¿Vale de algo la sentencia de un Tribunal cuando al final las consecuencias y la censura siguen ejerciéndose impunemente en algunos ayuntamientos de este país? ¿Os es que las sentencias judiciales son válidas cuando absuelven a políticos pero no cuando contradicen lo que yo pienso?

La citada sentencia sostiene que las letras de sus canciones (‘Explota Zerdo’ y ‘Síndrome del Norte’ eran las señaladas con mayor virulencia –canciones que llevan fuera del setlist años, por otra parte-) no constituían delito alguno. “Puesto que no hacen apología de ETA y tampoco incurren en menosprecio a las víctimas de la organización terrorista”, según la sentencia. Repito, entonces, ¿por qué entonces se vuelve a censurar?

En los años que duró aquel proceso judicial la banda casi no pudo tocar en ningún sitio o lo hacían clandestinamente. Dentro de lo demencial, puede ser casi entendible que ningún promotor quisiera arriesgar su inversión en aquellos momentos.

Pero, ¡ay la cultura, cómo sufre cuando la autoridad se confunde con autoritarismo! La psicosis se instauró y la caza se extendió a gente como Banda Basotti, Su Ta Gar o Los Muertos de Cristo durante varios años… También a Lendakaris Muertos le han buscado las cosquillas. Cualquiera que tuviera un mensaje en contra de la doctrina oficial. Y como denominador común en el tiempo, siempre Soziedad Alkohólika.

Es curioso que son siempre aquellos que se autoproclaman liberales (eso de servirse de voces divinas para proclamarse garantes del bien y del mal les viene de generaciones atrás) son los que sacan la mordaza, la tijera y la censura contra aquello que no son capaces no ya de entender, sino ni siquiera de respetar. (Y ojo, sin cinismo ni sectarismo, el mismo derecho a la libertad de expresión defiendo para Intereconomía, por irnos al otro extremo). Porque “la democracia y la libertad de expresión están muy bien, siempre y cuando digan lo que digo y pienso yo”, pensarán.

Continúa Soziedad Alkohólika: “Como todos sabéis, nos han intentado callar utilizando todos los medios legales, pero sus propias leyes siempre nos han dado la razón y nos dan todo el derecho a expresarnos libremente y a actuar en cualquier lugar. Puesto que por medios legales no son capaces de impedirnos dar conciertos, recurren a de nuevo a amenazas y métodos mafiosos propios de una dictadura fascista. Lamentablemente estas tácticas son cada vez más habituales en ciudades como Madrid. Todos sabemos que en Madrid la censura, el abuso de autoridad y los ataques contra la cultura y cualquier tipo de disidencia, funcionan mejor que nunca”.

Desde RockSesión nos solidarizamos con Soziedad Alkohólika. Este viernes deberían tocar en Madrid, y los viernes es día de críticas de discos remember así que Soziedad Alkohólika al menos sonará aquí. Si no nos censuran y en su honor haremos una remember de un disco de su discografía. Lo peor de todo esto es que, como dice Habeas Corpus, “nos estáis obligando a sentir cada vez más odio”.