Por fin este año y con este nuevo disco, Hora Zulú ha hecho bien las cosas con la gira. Acostumbrados a empezar a rodar incluso antes de tener el disco en la calle (por eso, por ejemplo, tan pocas canciones de Creer Querer Querer Creer en los setlist), esta vez la banda ha apostado por pocos bolos, concentrados en un par de meses y en sitios donde poder llevar su nueva propuesta, con teclados, con set acústico. Con otras cosas.

Antes de empezar tocó Zombies & Diamonds. Con un sonido mucho más duro y compacto que en su debut, ‘Walk With Me’, ofrecieron un buen rato de hardcore y stoner (a veces experimental) que dejó buen sabor de boca. Habrá que estar atentos a la inminente salida de su segundo trabajo.

El concierto de una hora y cuarenta y cinco minutos aproximadamente, muy meritorio para el calor que se generó en la sala, arrancó igual que el sobresaliente último álbum. ‘Mis Barraqueras’ (con problemas con la grabación flamenca), ‘Gabinas de Cochero’ y ‘Que La Tierra Te Sea Leve’. Tres trallazos con los que los asistentes demostraron saberse lo nuevo. No iban sólo a escuchar lo de siempre.

Aún así, la apuesta es alta, porque no tardaron en salir clásicos de los que se celebran con brío, como la funkypunk ‘Y No Protesto’ o la inmortal ‘Tango’. Con un equilibrio en la primera parte del setlist casi perfecto y con la fuerzas aún intactas, el sonido muy afinándose hasta lograr nota alta. Nada que ver con lo que se escuchó de ellos en el Viñarock. ‘Otro Guión Sin Escribir’ (sin la carta del Ché, por cierto), ‘Tanto Que Perdí’ y ‘Tientos’, terminaron de reventar la noche. Y nos aproximaron a la gran sorpresa y apuesta Zulú en este disco y en esta gira. No andarse con remilgos y mostrar más caras, más cosas que en los discos han solido dejar ver, pero que en los conciertos se han cortado.

Taburetes, guitarras y bajos acústicos para ‘Crom En Su Montaña’ y ‘Aspirante A Estilita’. Dos temas que, pese a la crítica inicial del respetable, fueron bien acogidos y que sirvieron para parar una tormenta que llevaba al agotamiento. Paco Luque concentrado como nunca en su guitarra sin distorsión. Incluso se veía cómodo al recién entrado Quini y a Álex Bedmar. De diez. Después otro bloque de canciones nuevas, ‘Siempre Soñé Saber Sobre’ o ‘Nuestro Entonces’ (el mejor ejemplo de la elegancia que ha encontrado el grupo en este nuevo disco), con las celebradas coreografías de ‘Con Mi Condena’, la favorita de Aitor, ‘Por Los Ceniceros’ y ‘Toma y Obliga’, entramos en un brutal tirón final.

La sonrisa ya estaba puesta en todos los asistentes. Y aún Aitor anunció ocho temas más. Así que con la certeza de que nos quedaba un buen rato de buenas canciones, el público echó arrojo y el resto. ‘Agua De Mayo’, ‘Golpes De Pecho’, ‘Camarada’, ‘Reinvención del Yo’… Imposible no vivirlos. Los más destacado del cierre fue la inclusión de ‘Que Me Mata’, un tema nuevo, entre los habituales ‘Andaluz de Nacimiento’ y ‘A Ver Si Me Entiendes’. Pero no chirrió.

Gracias a ‘Siempre Soñé Saber Sobre, Nadie Negó Nunca Nada’, Hora Zulú parece haberse sacudido cierta presión, a veces autoimpuesta, y ofrece en directo un concierto con empaque, sólido y con un repertorio muy bien gestionado, porque las canciones más viejas parecen haber madurado al lado del nuevo poso.

 
Setlist:

1. Mis Barraqueras
2. Gabinas De Cochero
3. Que La Tierra Te Sea Leve
4. Y No Protesto
5. Tango
6. Otro Guión Sin Escribir
7. Tanto Que Perdí
8. Tientos
9. Crom En Su Montaña
10. Aspirante A Estilita
11. Con Mi Condena
12. Siempre Soñé Saber Sobre Nadie Negó Nunca Nada
13. Por Los Ceniceros
14. Toma Y Obliga
15. Nuestro Entonces
16. Agua De Mayo
17. Golpes De Pecho
18. Camarada
19. Reinvención Del Yo
20. De-Que-Rer-Se
21. Andaluz De Nacimiento
22. Que Me Mata
23. A Ver Si Me Entiendes