Dover – Devil Came To Me (1997-2013)
Dover Came To Me es el título que se le ha dado a la reedición remasterización del disco que cambió la vida a la banda madrileña y, por qué no decirlo, a miles de personas. Aprovechando el quince aniversario de su lanzamiento (aunque al final ha venido a salir a los dieciséis), aparece este lanzamiento que, más allá de cuestionable afán recaudatorio, tiene suficientes ingredientes para que valga la pena. Además del disco remasterizado y un bonus track editado, el álbum se completa con un segundo disco con un directo extraído del doble concierto que Dover ofreció en la Sala El Sol de Madrid los días 8 y 9 de marzo, con ‘sold out’, por cierto. 20 temas en hora y cuarto que duraron aquellos bolos, el setlist completo. En tercer lugar un DVD con siete temas de aquellas noches entre los que se intercalan entrevistas al grupo, entrevistas individuales, los videoclips y tres temas del directo de noviembre del 97 en el Palacio De Deportes de la Comunidad. Y ver todo eso te reconcilia con una época… y con ellos.
El disco destacaba sobre todo por unas guitarras en primera línea. Ahí está el inicio de ‘Devil Came To Me’ como símbolo del disco y de una época en la que los efluvios post mortem de Kurt Cobain y Nirvana todavía andaban en un momento álgido. Cuando Oasis aún era competentes con su Morning Glory, Deftones andaba con su Around The Fur, Radiohead con su OK Computer. The Smashing Pumpkins, Stone Temple Pilots, Soundgarden, Alice In Chains, Bush, incluso No Doubt y Alanis, habían firmado sus mejores discos justo unos pocos meses antes.
El caldo de cultivo era el idóneo. Devil Came To Me llegó en el momento preciso. Todas esas canciones, compuestas la mitad de ellas en un cuarto de baño por Cristina, la otra mitad compuesta con relativa prisa al llegar al acuerdo con Subterfuge Records, después del fracaso inicial de Sister con Everlasting-Caroline, supieron conjugar varias cosas. Potencia y enormes melodías de guitarra de Amparo y Cristina, pero con mucha dinámica y sabiendo jugar con la acústica y con las distensiones rítmicas, pegadizos estribillos (casi todos lo son) y la dualidad entre visceralidad casi demoniaca de una sorprendente Cristina con la fragilidad necesaria.
Canciones como ‘Winter Song’, los coros doblados de ‘Nightmare’ o ‘Spectrum’ son ejercicios de melodía pop que permiten su entrada en el disco con la saturación de guitarras (las del segundo tema son atronadoras) y conviven con naturalidad con otras canónicas del grunge como ‘Pangea’ y ‘Push’ o casi punk como ‘La Monja Mellada’. El equilibrio, lo rotundo del álbum se percibía desde la primera escucha y ellos, sin saber ni imaginar el éxito comercial que los vendrían, sí reconocen que eran conscientes de que lo que estaban grabando tenía un alma especial.
Las entrevistas, como decía, reconcilian con la banda, que transmiten ilusión y casi inocencia al recordar esos momentos. Y se nota en el brillo de los ojos, en los rubores de Amparo al rememorar cómo hicieron callo en cuatro meses porque eran muy malos en directo porque pese a ensayar mucho tocaban muy poco. Consigue hacerte retroceder en el tiempo y darte cuenta de que aquello fue irrepetible. En las entrevistas individuales, Jesús Antúnez recuerda cómo se perdió las sesiones de grabación del resto porque tenía que trabajar (solo Cristina estuvo en todas) o como Samuel, el actual bajista, repasa cómo vivió aquel momento desde su banda Sperm (la anécdota de la cinta tirada al escenario es hasta entrañable y así lo transmite).
El inicio del álbum incluye tres joyas imprescindibles del rock hecho en nuestro país. ‘Devil Came To Me’, ‘Loli Jackson’ y ‘Serenade’ encierran un arranque de disco tan poderoso que muy pocas veces nadie ha podido superar. La rabia, la frustración, el diablo visto desde un punto de vista inocente, eso sí, pero presente en todo momento, la calma tras la tempestad… Todo está en menos de doce minutos. ‘Devil Came To Me’ conquista por el riff de guitarra y el fraseo y un estribillo extenso, su principal logro. ‘Loli Jackson’ por su parte juega con la melodía vocal accesible en la primera parte de la canción, hasta romper en visceralidad y ritmo machacón, tras un break muy logrado de bajo y batería. Y la guinda de la Santísima Trinidad (Malignísima) era ‘Serenade’. El inicio acústico de guitarra junto a Cristina, se endure progresivamente con un acompañamiento eléctrico muy saturado y un estribillo potente, compacto, estruendoso. Irrepetible.
Para completar el recorrido confesaré que, pasado el ciclón de inicio, siempre tuve especial predilección por ‘Rain Of The Times’, una canción en la que la música se ofrece contenida durante el fraseo desafiante, hasta generar un riff tortuoso, un bucle intenso. También ‘Judas’ tuvo su querencia, la guitarra poco electrificada crea una atmósfera idónea para que la batería esta vez coja primera línea, hasta desembocar en un estribillo con poco texto pero muy efectivo: «You Lied, You Lied, Jesus Was Only A Man«. Una actualización del ‘Heaven On Their Minds’. Para cerrar, una canción que en aquel momento se permitían no tocar en las giras: ‘Sick Girl’. Un bellísimo tema de cadencia mortuoria que llega a poner los pelos de punta pese a su estructura concisa.
La edición especial se completa con la versión del ‘Loli Jackson’ que se incluyó, antes de la salida del álbum, en una edición del recopilatorio Steroparty, que en aquella época editaba Subterfuge. Más cruda, más maquetera, pero similar en definitiva.
El audio del directo es un gran regalo si tenemos en cuenta que Dover no tenía un directo oficial editado hasta la fecha y que solo hay canciones rockeras en formato rockero. En el setlist está todo el Devil Came To Me, un par de recuerdos a Sister y mucha presencia del Late At Night (para mí el otro discazo, con una colección de ritmos de guitarra impresionante y que junto al EP It’s Good To Be Me! me parece lo mejor de su discografía, por mucho cariño que le tengan ellos al Follow The City Lights).
Es un directo peleón. Suena crudo, suena bien. Como digo, reconcilia y hace sentir. El público, los silencios. Todo. El DVD es más limitado. Incluye siete temas de esas noches, entre los que se encuentran ‘DJ’ y ‘Cherry Lee’, ajenas al Devil (no le encuentro sentido). Y tres del aquel famoso directo de noviembre del 97 que grabó Canal Plus y que casi todos teníamos grabado en cinta de vídeo. ¿Podrían estar los conciertos completos y hubiese sido aún mejor? Es posible. Pero sin duda, lo que hay está bien.
Después de escuchar los dos discos. De ver todo el DVD (aconsejo ver las entrevistas antes que el concierto, te contagian y te hacen recuperar la ilusión, verás los temas en directo con otros ojos), uno apaga el reproductor con una sonrisa. Con la satisfacción de haber revivido con intensidad un disco feliz y que soportará bien (ya lo está haciendo) el paso del tiempo. Pero también preguntándote muchas cosas, pero sobre todo ¿por qué lo hiciste Dover? Y también, ¿qué será lo próximo?
Espero que el demonio del rock y la distorsión les haya dado el mordisco definitivo.
Tracklist:
Cd1 – Devil Came To Me
- Devil Came To Me
- Loli Jackson
- Serenade
- Winter Song
- La Monja Mellada
- Spectrum
- Rain Of The Times
- Pangea
- Push
- Judas
- Nightmare
- Sick Girl
- Loli Jackson –versión Stereoparty 2-
Cd2 – En Directo, Sala El Sol 2013
- Rain Of The Times
- Pangea
- Spectrum
- Four Graves
- La Monja Mellada
- Winter Song
- DJ
- Flashback
- Push
- Serenade
- Far
- Angelus
- Anacrusa
- Nightmare
- Sea Witch
- Judas
- Sick Girl
- Cherry Lee
- Devil Came To Me
- Loli Jackson
Publicado el junio 28, 2013 en Actualidad y etiquetado en Alice In Chains, Bush, Críticas Remember, Devil Came To Me, Dover, Late At Night, Nirvana, No Doubt, Oasis, Radiohead, Soundgarden, Stone Temple Pilots, The Smashing Pumpkins. Guarda el enlace permanente. 3 comentarios.
Jefe, ¡qué bien escribes!
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