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Luter – 333

Luter 333A todos se nos revolvió el estómago cuando vimos/nos enteramos que Luter apareció en el programa de Televisión Española, ya difunto, ‘Hit – La Canción’. Una suerte de concurso donde autores presentaban sus temas a variados artistas ya consagrados. La mayoría de ellos eran anónimos y, muchos de ellos, con bastante más talento que las estrellas. Nos indignó (y permítaseme usar el plural mayestático, porque creo que muchos compartimos el sentimiento) que una autor como Eduardo García Martín fuera presentado como un desconocido, como alguien que iba a presentar una canción a Melendi (¡!). Entiendo, lógicamente, los motivos que llevan a Luter a hacerlo, pero refleja lo perversa que es la ausencia de justicia en el mundo musical. El pequeño Luter, con sus tres discos en Los Reconoces y la imponente trilogía en solitario (Añicos, Ignora y Orilla -disco de Oro en esta casa-) no le conocían y Melendi (oh) no lo seleccionó. Ahora el de Lacoma vuelve con su cuarto álbum, este ‘333’ que volverá a ser ignorado por La 1, La 2, Antena Sexta y Tele Cuatro. Tampoco sonará en las radiofórmulas, pero los que lo conocemos lo recibimos como maná de uno de los grandes autores de la última década.

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Luter – Orilla

LuterDice Igor Paskual (guitarrista de Loquillo, ex Babylon Chat y con un disco en solitario ya en cartera, Equilibrio Inestable) que prefiere ser cualquier cosa antes de que le llamen artista o cantante de ‘culto’. Es entendible porque lo que se asocia ante todo a la expresión, aplicado a la música, es un artista o grupo de calidad excelsa pero que no deja de manejarse entre pequeñas minorías. O-culto, más bien. Eduardo García Martín “Luter” se viene moviendo por esa denominación. Para la gran mayoría del público rockero es aún un músico al que se sabe que se le tiene respeto, con suerte alguno sabe que lideró a Los Reconoces de 1994 a 2006 y que editaron tres discos que aún hoy suenan con una frescura descomunal y que en solitario ya lleva, con este, otros tantos.

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