Archivo del sitio
Platero y Tú – Correos (2000)

Fito Cabrales ‘Fito’, voz y guitarra; Iñaki Antón ‘Uoho’, guitarra; Juantxu Olano ‘Mongol’, bajo; Jesús García ‘Maguila’, batería. Vale, no llega a ser un ‘once’ histórico del fútbol, ni siquiera un quinteto histórico del basket, pero sí es el póker de ases que (exceptuando a Leño por motivos evidentes), junto a Héroes del Silencio, tiene el honor de ser la banda más demandada del rock español cuando se le pregunta a alguien a qué grupo les gustaría ver de nuevo sobre un escenario. El caso es que gracias a Miguel Muñoz, que quiso contar con mi opinión para un reportaje publicado hoy sobre la banda en Cuarto Poder, caí en la cuenta de que justo un 2 de octubre, pero del año 2000, hace justo 20 años, se publicó el que a la postre sería el último disco de estudio con nuevas canciones de Platero y Tú. (No hay que olvidar que luego llegarían los dos volúmenes del recopilatorio Hay Mucho Rock And Roll, que supuso regrabar muchos de los temas, especialmente del 7 hacia atrás). La banda haría de la gira de este álbum su despedida de los escenarios, para pena de quienes nunca tuvimos ocasión de verles en directo. Con toda seguridad ellos ya sabían, sobre todo sus dos líderes, que este sería el último disco y de ahí ese título de desbarre final. Eran los Platero, pa’ lo bueno y pa’ lo malo.
Lee el resto de esta entradaTributo a Sabina – Ni Tan Joven, Ni Tan Viejo
Aunque vosotros no lo sabéis (algunos sí), para mi planificación se ha hecho esperar más de la cuenta mi crítica a este Tributo a Sabina, titulado Ni Tan Joven, Ni Tan Viejo, que parafrasea en mutación el título de una de mis canciones preferidas del poeta, por cierto ausente en la selección de 25 temas, y que, en mi opinión, tampoco le hace justicia del todo al conjunto por aquello de las similitudes formales con el ‘Ni Chicha, Ni Limoná’, de Víctor Jara. Entiéndase, pues, el título, como un guiño intergeneracional y, quizá, de eternidad creativa, por aquello de que gusta desde a los prepúberes como a los que andan en la plena senectud. Desde Guitarricadelafuente (21 años) a Joan Manuel Serrat (76 años). Y en medio de ellos, cantantes y autores melódicos, canallas y canallitas (que no es lo mismo), rockeros, más poetas, poperos con y sin botas de cuero… todos conversos a versos a la religión de Joaquín Sabina. Es más fácil encontrar rosas en el mar (ausencia destacada que nos robó la salud) que discutirle la imponente colección de canciones de Sabina, que da para otros dos discos como este y, para los que le apreciamos, hasta un tercero. Tampoco será cuestión de ponerse a repasar nombres que nos gustarían (cada cual tendrá los suyos) como si fuera una concreción del pasodoble de amigos ausentes (Sí recuerdo que bandas de rock como Porretas o Benito Kamelas hicieron hace años sus versiones). La crítica va, rasa y al pie, comentando impresiones individuales de cada una de las 25 canciones. Y no pido perdón porque ya no le importa.
#Mis10de Fito & Fitipaldis
Una vez decididos los 31+8 nombres de esta reedición de #Mis10de del mes de julio, a la hora de plantearme un orden, pensé que era buena idea que Platero y Tú y Fito & Fitipaldis coincidieran en el fin de semana. Y para decidir sus acompañantes foráneos, ¿qué mejor que usar a los de la eterna pregunta del y tú de quién eres? El eléctrico (Stones) para el día de los Platero y los más ligeros (en sonido) Beatles, para Fito. A veces parezco un tío complejo, pero en el fondo creo que tengo mecanismos sencillos y fáciles de entender. Como sabéis los más viejos del lugar, he sido crítico con Fito mucho tiempo, si bien esa nebulosa se ha disipado un tanto con su último de estudio (escribiendo estas líneas todavía desconozco si va a entrar alguna) y, especialmente, con la gira de 20º aniversario que recorrió otras tantas ciudades con otros tantos artistas invitados en cada uno de ellos. Fito Cabrales, menudo y flaquito, es un artista grande, que se lo ha currado y al que nadie le ha regalado nada. Sin envidias, debemos alegrarnos por él. Otra cosa es que todos llevemos alguna espinita clavada porque queremos ver a Platero, pero también por los amigos que ha ido dejando en el camino, con los que lleva muchos años sin hablarse. Y creo que a él también le duele. Pero, no es tan difícil, solo hay que cruzar el mismo umbral hacia detrás. Necesitamos ese favor. (FOTO: José Antonio Holgado por el Área de Cultura del Ayuntamiento de Almería).
Fito & Fitipaldis. Almería, 15 de junio
Cuando alguien te ha hecho vibrar y sentir con intensidad con su música, uno siempre le guarda un irremediable cariño aunque, en algún momento del trayecto, tu camino y el suyo se distancien. Veinte años no son nada, dice el cantar, pero también dan para mucho. Para conexiones más o menos fuertes, momentos altos y bajos, como ocurre con cualquier interrelación personal y, por supuesto, en la relación que entablamos con el grupo en cuestión. Anoche, dentro de la selecta gira de ’20 Años, 20 Ciudades’, volvía a ver a Fito & Fitipaldis ocho años después de mi última vez. Lo hacía esperanzado por el repertorio y con muchas ganas de reconciliarme con él. Quería volver a creer (a lo Expediente X) y me lo puso fácil. Un directo sin alarde de efectos, con una escenografía sobria pero lo bastante atractiva para que cada tema tuviera unas condiciones lumínicas distintas, una banda sin alardes de cara a la galería pero con una precisión de cirujano, un sonido de los mejores que recuerdo en los últimos años y, sobre todo, una actitud serena y agradecida, pero sin imposturas. Con la sabiduría que da el llevar más de treinta años en los escenarios y ser consciente del camino de un libro inacabado. (Fotos: Área de Cultura del Ayuntamiento de Almería).
Cincuenta años del ‘pequeño gran rockero’, Fito Cabrales
Fito Cabrales cumple hoy 50 años. Medio siglo para el pequeño gran rockero de nuestra escena. Aunque buena parte del público que lo veneraba se hace cruces y maldice el sino por cómo ha evolucionado su obra creativa en la última década, nadie le discute su importante influencia y su notoriedad a lo largo de toda su carrera. Platero sigue generando reverencias con solo nombrarlo. Ahí quedó la composición poetizada del Extrechinato y Tú, en la que fue parte fundamental. Y acumula en su carrera con Fitipaldis una notable colección de discos. El rocanrol suele vivir en una urgencia en la que envejecer está mal visto y, si lo consigues, lo está que lo hagas madurando. O adaptando tu música a tus nuevas necesidades o apetencias. Fito ha sido víctima de todo ello, como también le ha tocado a Rulo, y le tocará a las futuras estrellas del mañana. Valgan estas líneas de felicitación.
Fito & Fitipaldis – Huyendo Conmigo De Mí
Sexto disco en estudio de Fito & Fitipaldis. Quizá el que más interrogantes ha generado en una larga espera. Casi seis años lo separan del anterior ‘Antes De Que Cuente Diez’, posiblemente, su entrega más floja. Fito, que entre otras cosas siempre ha sido ‘Un Tipo Listo’, como decía en su anterior banda, decidió que no podía imponer plazos a las musas. Que su autodeterminado continuismo tenía un límite a la hora de crear. Pasados estos años, después de seguir reventando pabellones y plazas de toros y después de agotar en todos los conciertos de la gira de teatros, más íntima, Fito se reconcilia con las musas en ‘Huyendo Conmigo De Mí’. ¿Realmente es más de lo mismo como se puede leer por ahí? Vamos a explicar nuestra versión del disco.
Fito & Fitipaldis – En Directo desde el Teatro Arriaga
Andaba Fito atascado con las musas desde que Antes De Que Cuente Diez agotara su ciclo vital. Como no era cuestión de forzar la maquinaria (buena parte del citado disco suena precisamente así, demasiado vacuo), a Fito Cabrales y compañía, sus Fitipaldis, se les ocurrió montar una gira pequeñita, en teatros de pocas ciudades, algo limitado porque estaban agotados de largas giras de estadio. Recuperar la esencia, era el objetivo. Al final aquella gira se alargó por los casi 50 conciertos, se puso el cartel de no hay billetes en buena parte de ellos, algunas veces hasta repitiendo varios días en la misma ciudad. Aquello había que cerrarlo y se hizo de la mejor forma posible: con conciertos benéficos y en casa, en el Teatro Arriaga de Bilbao. Actuaciones que se grabaron para editar este doble disco de audio y DVD que recoge el sonido de aquella gira. Aquella de la vuelta a la esencia. Esta es la crítica de RockSesión.
Luter – Orilla
Dice Igor Paskual (guitarrista de Loquillo, ex Babylon Chat y con un disco en solitario ya en cartera, Equilibrio Inestable) que prefiere ser cualquier cosa antes de que le llamen artista o cantante de ‘culto’. Es entendible porque lo que se asocia ante todo a la expresión, aplicado a la música, es un artista o grupo de calidad excelsa pero que no deja de manejarse entre pequeñas minorías. O-culto, más bien. Eduardo García Martín “Luter” se viene moviendo por esa denominación. Para la gran mayoría del público rockero es aún un músico al que se sabe que se le tiene respeto, con suerte alguno sabe que lideró a Los Reconoces de 1994 a 2006 y que editaron tres discos que aún hoy suenan con una frescura descomunal y que en solitario ya lleva, con este, otros tantos.