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Cero a la Izquierda – Campo de Minas
Lo malo de ser tan bueno siendo tan joven es que es fácil que te pongan etiquetas con facilidad. ‘Los nuevos Platero’, el relevo, el futuro… ganas de dar estandartes. Y sobre todo que puedas encontrar una cohorte bufonesca de envidias, basadas en la frustración, hacia quien sí consigue ser creíble. Si hay mantras o frases que han pasado al lenguaje colectivo del mundillo del rock es el ‘No quiero ser como tú’ del Pedrá firmado bajo el nombre de Extremoduro. Cero a la Izquierda, con una media de edad que no supera los 24 años en sus cuatro componentes, lanza Campo de Minas, su tercer larga duración, donde dejan muy a las claras que no quieren ser como nadie. Quizá transmitan o apunten a unas letras que no concuerden con su edad pero, ojo, sí con su madurez. Con los pies en el suelo, sin dejarse llevar ni por las flores ni por los cardos, recogen los frutos de los 70 conciertos de la gira de No Ha Dejado de Llover y se liberan de cualquier atadura en su nueva creación. Un álbum que nos da una formación valiente y sin fisuras. Ni de ejecución, ni de actitud y, lo más importante, de autenticidad. Y es que la imitación da un subidón narcisista para regalo de los oídos, pero tiene las patas muy cortas. Esto es otra cosa.
Cero A La Izquierda – No Ha Dejado De Llover
Tres años después de su debut La Vela Muda y pasando de ser un quinteto a ser un cuarteto, los navarros Cero A La Izquierda regresan más maduros y con las ideas mucho más claras con No Ha Dejado De Llover. Segundo trabajo que viene de la mano de El Dromedario Records, el sello de Alén Ayerdí, entre otras cosas baterista de Marea y Ciclonautas, con los que compartirán gira de presentación por una decena de localidades (de hecho empieza el fin de semana próximo en Granada y Murcia, donde podré ver a ambos, si todo va bien). Con la confianza que da tener el respaldo de profesionales contrastado alrededor, la banda ha aprovechado su segundo disparo con un álbum compuesto de once cortes a los que se les coge cariño rápido. Rocanrol de toda la vida con pequeño toque metalero por allí, algo de AC/DC por allá y los referentes del castellano bien respetados.