Como sabéis los más viejos del lugar y quienes habéis compartido conmigo muchas conversaciones musicales, que mi relación con la música de O’Funk’Illo tiene un poderoso componente de amor-odio. Amor por el virtuosismo de Pepe Bao al bajo (al que he llegado a disfrutar en un festival de jazz llenando él solo el escenario) y, generalmente, el resto de músicos que han acompañado a la banda. También la voz de Andreas me ha parecido siempre personal y solvente para empastar con el concepto tan personal de su música. Si bien siempre ha habido algo en sus directos que no me ha convencido… Y no será por oportunidades. Así que, para que os situéis ante 5Mentario, lo mejor que puedo anticipar es que tiene argumentos suficientes como para haberles dado una vida extra y que me hayan dado ganas de volver a verlos. “La oportunidad refinitiva”, que decía aquel.

No hay duda. Que O’Funk’Illo es el mejor exponente (¿pioneros? ¿únicos?, seguramente) de esa fusión, no solo de funk, sino de rap, metal, rock, improvisación jazzística y querencia andaluza (funky andalú embrutessio, lo llaman) está fuera de dudas. El trabajo técnico en estudio y el sonido estratosférico también. Así que siendo la materia prima de gran nivel, todo queda en manos de la bondad o no de las canciones. 5Mentario tiene nueve y dan para muchos registros.

El disco se abre con ‘Soñar Despierto’, quizá la mejor elección posible por la variedad de formatos y cambios de ritmos que presenta el tema y por ese desfase improvisado final con un Bao haciendo magia con las cuerdas sobre un ligero piano. Sobresaliente. Instalados en el buenrollismo, ‘La Positiva’ es la más ‘fumeta’ del álbum. Funk más puro para un ejercicio rítmico tan efectista como en demasía previsible. Por su parte, ‘Disturbio Bipolar’ es el tema más coetáneo a su tiempo, por la inspiración argumental entorno a las protestas del 15-M, con cortes de sonido real (disparos y gritos) de las manifestaciones. Una canción mucho más virulenta en distorsión, que va calentando el ambiente para el mejor tramo del álbum.

‘Hirviendo’ es un canto a la lujuria bien hilvanado mientras que ‘Pegotes de Colores’ lo es a las sustancias psicotrópicas y a los viajes espaciales. Algo para lo que la música de O’Funk’Illo ofrece pase preferente. Grandes las referencias en el texto a Breaking Bad y Heisenberg. En medio de ellas, ‘Las Lápidas No Entienden’, otro corte (el que más) potente y aguerrido, con gran labor de guitarras de Dave Lerman.

En el último tercio del álbum encontramos ‘Bajo y Voz’, un cálido homenaje sin caer en el drama de Andreas a una amiga ausente, válida como catarsis anímica para cualquiera que haya vivido el trance y que tiene la guinda en los coros de Alba Molina con pequeños arreglos de orquestación. El tono se recupera, como buenos rockeros, saliendo de fiesta con ‘Hoy La Voy A Liar Parda’. Sí, no es un derroche de imaginación para la canción consigue el objetivo de divertir. Por último, ‘El Personaje’ es, sin duda alguna, el mejor corte del álbum por lo surrealista, lo imprevisible y lo delirante de texto y música. El arranque con española hace pensar en una segunda parte del ‘Bulemetal’ del Sesión Golfa, pero pronto el tema deriva a terrenos que van desde los metales incendiarios al imponente solo del eterno Rafa Kas.

En definitiva, un disco que relanza sin duda a O’Funk’Illo como una banda de una personalidad propia descomunal y que nos hace volver a creer a los escépticos en que un buen directo es posible. Apuntados los tengo ya para el Viña.

En Spotify.

Tracklist:

1. Soñar Despierto
2. La Positiva
3. Disturbio Bipolar
4. Hirviendo
5. Las Lápidas No Entienden
6. Pegotes De Colores
7. Bajo y Voz
8. Hoy La Voy A Liar Parda
9. Personaje