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El Cuarto Verde – Ondas De Choque
Con unos meses de retraso previsto a los planes iniciales, este mes de marzo nos ha regalado el nuevo trabajo de los riojanos El Cuarto Verde. Una banda a la que siempre le hemos prestado especial atención en esta casa por su forma natural y solvente de mezclar los patrones clásicos del rock urbano más al uso, con una contemporaneidad bien entendida que, sin grandes revoluciones, sí que renueva un tanto los códigos previsibles y habituales del formato, para acercarlo a terrenos más anglo, bailables, melódicos… sin perder por ello brío en el intento. Así lo destacamos allá por noviembre de 2015 cuando lanzaron Metroglobina aunque, como dije en aquella crítica, me enamoré de ellos mucho antes, con “El Piloto De Hiroshima”, una de las canciones que formaban parte de su segundo trabajo en estudio, Narcoiris. Me sorprendió la potencia en el sonido con una gran capacidad melódica en las voces. Comercial, pero con una fuerza apabullante. Aquella canción me acompañó durante un tiempo en ‘la maleta’ de pinchar y sirvió para que la pestaña de seguimiento comprobara en cada lanzamiento que a veces las primeras impresiones se quedan y evolucionan de manera favorable con el paso de los discos. Así lo corroboraron después en el directo Fuimos Decididos A Incendiar El Parlamento en 2017 y a finales de 2018 con el temático Siete Pecados Capitales, donde se marcaron un ‘Seven’ con un tema para cada uno de ellos. Ahora llega este Ondas De Choque donde la banda quizá ya no sorprenda tanto… si no es de por sí ya sorprendente mantener un notable nivel en las formas y el empeño en seguir en esto de los rocanroles pese a las circunstancias.
Lee el resto de esta entradaEl Cuarto Verde – Siete Pecados Capitales
Desde Aurelio Prudencio en el siglo IV al Arcipreste de Hita. De ‘Seven’, con Morgan Freeman y Brad Pitt, a aquello de “otra vez quiero más, que la lujuria no es mi único pecado capital. El orgullo y la envidia, la gula, la soberbia, la pereza y la avaricia” que cantaba Roberto Iniesta en el disco de Extremoduro publicado en septiembre de 1993, ¿Dónde Están Mis Amigos? (curiosamente, la primera crítica remember de la historia de esta casa). Los pecados capitales, nombrados así por la raíz de otros pecados secundarios derivados de ellos, han sido fuente de inspiración constante en todo tipo de artes. Los últimos (por ahora) en incorporarse a esa lista es la formación rockera riojana El Cuarto Verde, de quien ya hemos hablado aquí a raíz del lanzamiento de su anterior trabajo de estudio, Metroglobina. Siete Pecados Capitales es su nuevo disco. Con siete canciones, una para cada uno de ellos. Una estructura pautada sobre la que despliegan diferentes matices de su rock que bebe tanto del clasicismo como de un cierto aperturismo cuasi indie.
Los Discos del año 2015 de RockSesión
Por tercer año consecutivo (me arrepiento de no haberlo hecho el primero), vuelven las medallas de RockSesión. Un total de 24 trabajos que se llevan oro, plata y bronce, ocho por categoría, que merecen ser recordados por varios motivos que explico brevemente. (El que quiera explicaciones completas que visite la crítica que, salvo algún caso podéis encontrar en el enlace). He extraído de la lista EP’s que apuntaban a metal (Svuco) por no ser álbumes completos y, sobre todo, directos, que este año ha vuelto a ser prolífico: especialmente destacable es el de Burning, pero también están los dos de Bunbury (uno con Calamaro), Capitán Cobarde, Vetusta Morla, Sublevados, Los Reconoces, Tenpel, Caskarrabias, La Frontero, Los Toreros Muertos, Los Benito o Forraje. También excluyo discos a caballo entre la regrabación y la novedad, claramente Mägo de Oz y su Finisterra Ópera Rock y Loquillo y su Código Rocker, son los dos casos más evidentes. Al lío, esta es la lista de oros, platas y bronces de RockSesión. (El orden de cada categoría es alfabético). PLAYLIST en Spotify.
El Cuarto Verde – Metroglobina
Me enamoré de ellos con ‘El Piloto De Hiroshima’, una de las canciones que formaban parte de su segundo trabajo en estudio, Narcoiris. Me sorprendió la potencia en el sonido con una gran capacidad melódica en las voces. Comercial, pero con una fuerza apabullante. Aquella canción me acompañó durante un tiempo en ‘la maleta’ de pinchar. Pasados cientos de discos y algún que otro año, ya no me acordaba de ellos. Hasta hace unos meses que conocí que volvían con tercer disco, de la mano de Rock Estatal Records. Así que me pillaban cerca. Metroglobina es su regreso, diez canciones que reafirman las buenas maneras de una banda a la que es difícil meter en un cajón de sastre, que son capaces de hasta ‘desnaturalizar’ el hábitat sonoro de Rosendo con una soberbia colaboración en ‘Cómo Purgar El Radiador De Una Casa Deshabitada’. Se mantiene la curva ascendente.