Archivo del sitio

Hora Zulú. Almería, Berlín Social Club. 16 de mayo

Pese a ser habituales en The Juergas Rock Festival de Adra y visitando El Ejido en tres ocasiones en el último lustro, han tenido que pasar doce años  y medio –una barbaridad- para que los granadinos de Hora Zulú actuaran en la capital de la provincia almeriense. Demasiado para una banda a la que siempre “se le ha tenido ley” por estos lares no solo por cercanía vecinal, sino porque su música se ha sentido también como propia desde esa esencia de ‘pena negra’, contundencia metalera y la agilidad de unas letras nunca inanes. Y lo hacían el pasado viernes –disculpen la demora- festejando 25 añitos de trayectoria por lo que el goce se presuponía mayor al abrirse la posibilidad a recuperar temas menos habituales o de tiempos atrás. Aunque, si les digo la verdad, cuando la media del material más reciente sigue siendo tan alta casi que no importa cuál sea el criterio de selección porque la batalla está ganada de salida en ese sentido… Por más que se puedan echar de menos otras tantas. ¡Conciertos a lo Bruce Springsteen, de tres horas, es lo que hace falta! Con todo, la sala Berlín Social Club, de nombre pintón pero no tanto así de distribución -las columnas siguen siendo condena en el Parque Nicolás Salmerón con los conciertos, como también ocurría con Madchester Club– abría sus puertas con notable asistencia de aforo a los siempre imprescindibles Hora Zulú. Consuelo para el alma y sosiego para los nervios. (FOTOS: Juan Jesús Sánchez Santos para RockSesión).

Lee el resto de esta entrada

The Juergas Rock Festival 2024. Viernes, 2 de agosto

A diferencia de otras ediciones, donde se podía vislumbrar más agrupaciones punk, rock, rap o metal rap, la mezcolanza en los días ha sido el denominador común en la undécima edición de The Juergas Rock Festival. Eso ha permitió a los asistentes repartirse descansos y asistencias de forma cómoda (admitámoslo, es complicado estar en todos de principio a fin, más todavía con unas temperaturas tan altas y cuatro días de mandanga). El del jueves quizá sea el de mayor heterogeneidad y, quizá por eso, uno de los más entretenidos. Además, en lo personal, tenía el pequeño triunfo moral del “regreso” de Hora Zulú al festival, donde no pisaba desde 2019. Saludé a la banda antes de comenzar y nos pusimos al día en el futuro más inmediato. Siempre un placer. Nosotros nos trabajamos a Hora Zulú, Kaótiko, Non Servium, Lendakaris Muertos y Los De Marras (FOTOS: Juan Jesús Sánchez Santos para RockSesión, menos Los De Marras) y también actuaron Manny Calavera y O’Funk’Illo en el escenario Agustico y Skindred y Gomad & Monster en el principal (FOTOS: Organización).

Lee el resto de esta entrada

JJ Fuentes, Nat Simons y Aitor Velázquez (Hora Zulú), juntos en “A Los Pies De La Alhambra”

Menuda triple unión la que se reúne en “A Los Pies De La Alhambra”, el nuevo adelanto de lo que será El Heredero, el próximo disco del almeriense JJ Fuentes y donde se reúne con nombres ilustres como Kutxi Romero, Fernando Madina, Aurora Beltrán, Diego Vasallo, Álvaro Urquijo, Jesús Cifuentes… y muchos más por anunciar. Esta nueva gema es absolutamente deliciosa y bella en la armonización de voces entre JJ Fuentes y Nat Simons, a quien le aplaudimos bien su brillante Felina y Felinas y su confirmación en el cambio del inglés al castellano. Por su parte, nadie, salvo Carlos Cano o Enrique Morente, es capaz de recitar con tanto sentimiento, cariño y conocimiento de causa a Granada como nuestro querido y admirado Aitor Velázquez de Hora Zulú (a quien por suerte vuelvo a ver en una semana en The Juergas Rock Festival), que aporta su solemnidad y brillantez antes del estribillo final. Una magnífica fusión que se ha estrenado hoy, precisamente el día en el que JJ cumple 29 insultantes años. Os dejo con la canción y el resto de singles y con un poco más de información (recordatoria) sobre el proyecto. Salud.

Lee el resto de esta entrada

Hora Zulú – Miraveh (Volumen I)

Por fin. El pasado viernes (3 de noviembre) vio la luz Miraveh, el nuevo proyecto de Hora Zulú formado por cuatro temas y dos intros que mis oídos han tenido la suerte de venir escuchando de manera habitual, en su versión premezclada (obra del querido y añorado Manuel Ángel Mart) y en una sola pista de diecipico minutos de corrido, hace más de dos años. Fue en verano de 2021 cuando los señores Paco Luque (guitarras eléctricas, bajos, teclados, loops y composición musical), Aitor Velázquez (voz y letras) y Javi Cordovilla (batería y percusión) me confiaron la escucha de ese ‘nuevo juguete’ que tenían entre manos. «Nos hemos visto tantas veces en listas de rock o metal flamenco, sin tener ninguna canción puramente flamenca, que me daba hasta apuro. Así que nos pusimos y salió Miraveh», me explicaron entonces. De hecho es que, tal y como ocurrió en su día con Pedrá, que era un proyecto propio en sí mismo distinto a Extremoduro pero que tuvo que salir casi dos años después bajo su marca porque si no, no había tutía, Miraveh también iba a ser al principio un sello de marca propia, al margen de Hora Zulú, dada la gran cantidad de colaboraciones que había de por medio. Sea como fuere creo que es más acertado que al final se haya como tal, bajo el nombre de la banda a la que primero admiré al nivel de otros grandes y a la que con el paso de los años tuve el gusto de considerar amiga. Por si ya no bastaba con lo hecho hasta ahora (me duele la boca de recomendarlos allá por donde ande), Hora Zulú eleva todavía más su propia leyenda.

Lee el resto de esta entrada

Hora Zulú. Industrial Copera. 17 de diciembre

En una década enfermiza por la instantaneidad, lo efímero y el poco reposo a la reflexión, lo urgente de los trabajos, la necesidad constante de exposición, la obligatoriedad de tomar partido y mostrar opinión por todo, la vacuidad del ocio cimbreado por cuentas atrás para el siguiente capítulo, los clickbaits, el ruido en toda la gama que va de ultradiestra a siniestra, fiscales que mueren de forma repentina, personajes populares que acaban siendo el pelele de Goya subiendo y bajando para el escarnio hasta que revientan, polémicas azuzadas con el poco raciocinio del pirómano frente a un bosque, el orgullo del lenguaje pervertido para convertirse en un arma arrojadiza, talibanismos culinarios, majaracas del negacionismo, egoísmo en distintas escalas y maneras, de pose y pase, la total y absoluta falta de criterio propio para evaluar un hecho sin tener que sumarse a uno de los frentismos, lo del ni machismo ni feminismo, lo de a los extranjeros le dan más, los que claman por unos agravios mientras esconden la mierda de los suyos bajo la alfombra… Ante todo eso, encontrar todavía estímulos no corrompidos que nos sirvan de toma de tierra, de pulcra y límpida emoción, que sea como un chute de enriquecimiento para el coco y alimento para el alma se ha convertido en un auténtico lujo. Y para mí, mucho antes de que existiera esta casa, eso lo representa Hora Zulú. Así que, 25 meses después de verlos en su misma ciudad y en la misma sala, cuatro meses antes del estallido pandémico, nos fuimos para Industrial Copera de Granada a verles hacer lo de siempre, pero con la sabiduría que dan los años. De nuevo reinventado, de nuevo fortalecido. (FOTOS: Juan Jesús Sánchez Santos para RockSesión).

Lee el resto de esta entrada

Hora Zulu – Limpiar, Fijar y Dar Esplendor

A pocas bandas de nuestro país se le podría ocurrir o, más allá, sentar mejor el uso de la histórica leyenda de la Real Academia de la Lengua como título de un disco. Teniendo en cuenta que llevan años “manejando a su antojo el lenguaje”, que en su día su vocalista, Aitor Velázquez, intentó la machada de leerse el María Moliner al completo y que el álbum va de pulir, perfilar y sacar lustre con el sonido y sabiduría actual a una colección de canciones de sus dos primeras entregas (Me Duele La Boca De Decirlo (2002) y Crisis De Claridad (2004)), inferimos que tiene todo el sentido del mundo, con Paco Luque a la guitarra, Javi Cordovilla a la batería y Álex Bedmar al bajo. ¿Cuántas veces sea ensoñado aquello de ‘me gustaría volver a los 20 años pero sabiendo todo lo que sé ahora’? Empujados por el lado tenebroso ‘del negocio’, que les ha llevado a grabar las canciones para recuperar los derechos de autoría de las mismas, este álbum va de eso. Es un ejercicio que casi siempre es ingrato (porque siempre te dirán aquello de que ‘antes era mejor’, por ahí ya pasó Extremoduro, Soziedad Alkohólika, etcétera) pero del que Hora Zulu sale del todo victorioso, con corona láurea y vítores merecidos. Un sonido mucho más grueso (cada vez más), un tono, por lo general, más sobrio en lo vocal, unas guitarras repletas de arreglos y sonoridades que enriquecen las líneas melódicas de las originales, un bajo muchísimo mejor mezclado y una batería más afilada y contundente. Como resultado, un sonido más fiel a lo que le venimos escuchando en el escenario antes de la pandemia y la madurez de unas canciones que nos calentaron las venas con 20 años, pero sonando con el empaque y la seriedad que queremos a los 40. Si la pena es que se hayan dejado la otra mitad de cada uno de ellos.

Lee el resto de esta entrada

Hora Zulú. Industrial Copera. 16 de noviembre

 

Entre todos hemos ido matándola, pero todavía no está muerta del todo. Para los que nos gusta la música en directo jamás puede ser lo mismo, ni cercano a ser comparable. Las sensaciones, el calor (pese a estar a pocos metros de una Sierra Nevada haciendo honor a su nombre), el sonido, la duración… La magia de un concierto en una sala jamás puede ser sustituido por el de un festival. Por eso, aunque se me acabe el tiempo para contaros todas y cada una de las veces que los he visto, se me puso a tiro la opción de ver a Hora Zulú en su casa y en sala, en su Granada, y no podía desaprovecharla. La estocada vino con la confirmación de la presencia de Sho-Hai y Soziedad Alkohólika, para echarse unas coplas. Así que RockSesión cogió rumbo a la Industrial Copera para asistir a la presentación oficial de su último disco La Voz Del Amo  del que, por desgracia eso sí, no suenan demasiadas. Y pasados los efluvios de la emoción instantánea, hay que concluir que no podemos dejar que el circuito de salas se muera. Sí, hay bandas a los que no es posible ver de otra manera que no sea en un festival, sobre todo para los de provincias pequeñas, pero es la pescadilla que se muerde la cola. Los grupos punteros se hacen las grandes ciudades, los pequeños apenas pueden salir de su radio de 100 kilómetros. Id a las putas salas, nos duele la boca de decirlo. Aquí la crónica del sábado (FOTOS: Juan Jesús Sánchez Santos para RockSesión).

Lee el resto de esta entrada

The Juergas Rock Festival 2019. Jueves, 1 de agosto

 

Si ayer comentaba que el salto de calidad, o en cuanto a los cabezas de cartel, en la fiesta de bienvenida previa a los tres días ‘de pago’ del festival, no tanto ocurrió así con el elenco de los conciertos del escenario acústico. En términos objetivos, hubo en la pasada edición del Juergas una reducción en el número de participantes, pasando de tres a dos por día, además de la eliminación de las secciones de La Hora Emergente y EntrevistARTE, que se compensó atrasando las horas de inicio de los dos conciertos del dicho enclave en el Paseo Marítimo de Adra. Blue Caravan y Té Canela eran las propuestas para la primera jornada ‘de abono’. Para la segundo, recordamos, serían Ombligo y La Vallekana y para el sábado Iker y Alfredo Piedrafita y Jamones Con Tacones.  Una apuesta de otro color, matiz e intención en la mayoría de los casos, si tenemos en cuenta que otros años pasaron por el mismo formato, a saber: Kutxi Romero, Poncho K, Capitán Cobarde, Los De Marras, Mala Reputación, Fernando Madina, El Kanka o Antílopez. En el recinto principal esperarían los almerienses No Potable, la rapera Anier, Gatillazo, Berri Txarrak, Boikot, Hora Zulú, Talco y Sons of Aguirre & Scila. (FOTOS: Marina Ginés: Berri Txarrak, Hora Zulú y Talco / Juan Jesús Sánchez Santos: Blue Caravan, No Potable, Anier, Gatillazo y Boikot. Se pueden usar libremente citando siempre al medio y su autoría).

Lee el resto de esta entrada

#Mis10de Hora Zulú

 

Si alguien me preguntara mi grupo favorito creo que, sin dudar, respondería siempre Extremoduro, quizá por aquello del valor del amor que te hace ver el mundo de otra manera. Si me preguntan qué grupo no me cansaría de ver y escuchar nunca, de qué grupo me cuesta más pasar por el trance masoquista de quedarse con solo diez temas para esta sección, diría siempre Hora Zulú. Los granadinos tienen en ese punto de pena negra que tan bien conecta con los que sentimos devoción por el noble arte del flamenco, la copla… de negra inquietud. Ya lo dice la propia canción de la banda. Riffs imposibles que beben de los mejores tocaores, un ritmo marcial y de caja-bombo que se hace adictivo, un bajo musculoso y reforzador, unos textos insuperables y una voz grave, como gruesos son los fondos de cada uno de los mensajes. No. No soy comedido con los adjetivos hacia Hora Zulú porque a pocas bandas querré más que a ellos. Y es que cuando te han hecho sentir tanto, el respeto obliga. Y quiso el azar, la profesión y el tiempo que entablara amistad y confianza con ellos, hasta extremos que no podía imaginar en mis tiempos ‘anónimos’, por lo que no puedo estar más agradecido. No están sus canciones más populares pero sí son las que más me han hecho sentir por dentro con los años. Lo malo es que no son las únicas. Como decía una vieja amiga, ver un concierto de Hora Zulú es sentir las puñaladas canción a canción. Depende del repertorio, pero casi que sí. (FOTO: Paskohne). Lee el resto de esta entrada

Hora Zulú – La Voz del Amo

Mañana, viernes, 15 de febrero, verá la luz La Voz del Amo, el sexto álbum de los granadinos Hora Zulú. Sonando los últimos días en mi reproductor, es el momento de desvelar, horas antes de su salida, cómo es el nuevo trabajo de los Aitor Velázquez, Paco Luque, Álex Bedmar y Javi Cordovilla. Partimos de la base de que es difícil catalogar en pocas palabras todo lo que es capaz de transmitir la banda tanto en lo musical, como en la expresividad de las líneas vocales y, cómo no, en los textos de su autor. Quien lo probó lo sabe y quien quiera entender que entienda. Dicho esto, y a modo de breve sinopsis, os adelantaré que tiene el sonido mejorado del SSSSNNNN, también por los arreglos de teclados que se deslizan en unos cuantos temas, pero con una agresividad más cercana al segundo y tercer disco. Todo esto dicho con mucho temor y comillas, ya saben. No vaya a ser que los que nos copian digan luego que “vuelta a los orígenes” o algo así. La lírica vuelve a estar cuidada al extremo, con los denominadores comunes de las vueltas al latín y a las referencias cristianas (paganizadas, en este caso) y una importante dosis de desahogo y liberación de inquinas, manías y advertencias contra estupideces. Audite, malum lac, in summa.

Lee el resto de esta entrada