Santero y Los Muchachos – Rioflorido
Su primer disco, Ventura, cayó a mis oídos demasiado tarde como para hacer crítica del disco como si fuese una novedad y demasiado pronto como para poder considerarse una crítica remember de los viernes. Con ‘la pestaña de seguimiento’ activada, los tenía en la lista para seguir sus pasos en siguientes lanzamiento, por si el nivel lo merecía, traéroslo a colación. Y así ha sido. A principios de este mes de marzo veía la luz este Rioflorido, el segundo larga duración de la banda valenciana Santero y Los Muchachos, que guarda los principios fundacionales de su debut, pero yendo un paso más en la ambición que da la seguridad de que se está apreciando lo que se ofrece. Autodefinido como rock reposado, la escucha de Santero en general y de este Rioflorido en particular debe considerarse como una suerte de delicatesen para momentos elegidos. Las guitarras eléctricas tienen la distorsión justa, se juega con terrenos semi acústicos y desenchufados al completo, aparecen sutilmente metales, dobros, contrabajos, lap steel y percusiones orgánicas. Si a algún despistado le contamos que algunos de sus componentes han formado parte de bandas como La Pulquería y Obrint Pas, no nos creería. Pero es que la música es así de grande, por eso nos tiene locos.
Rioflorido es un disco congelado en el tiempo, en el sentido más positivo de la acepción, puesto que es atemporal su escucha. Porque aunque sus influencias vayan de los 50 a los 70, su sonido es actual a rabiar. Cuentan que la mayor parte de la inspiración, composición y grabación se llevó a cabo en El Palacete del Marqués de Rioflorido, construido a finales del siglo XVIII. La banda la conforman Miguel Ángel Escrivá al bajo, contrabajo y voz; Josemán Escrivá a las guitarras, pianos y coros, hermanos, y los también hermanos del ritmo, casi consanguíneos, Soni Artal a las guitarras, lap Steel y dobro y Pau García-Serra en la batería y percusión. Todos participantes de los coros.
El álbum se abre de manera magistral aunque, visto con perspectiva, el viaje es de media alta en casi todo el metraje. En términos generales, encontramos a una banda que destila un savoir-faire intachable que se mueve entre el rock estiloso de la excepcional entrada en ‘Estamos Bien’ a los aires portuarios de ‘Mañana Asesina’, con colaboración de un viejo conocido de esta casa como es El Twanguero, o la épica americana de ‘Volver a Casa’, coros finales incluidos, o la bulliciosa ‘He De Olvidarte’, con un texto lleno de entonaciones mágicas y finas ironías. Y es que también merece destacada mención las letras, que encajan en melodías y armonías vocales con los versos con una facilidad pasmosa.
Si los primeros cuatro temas ya son suficientes para hacerse santero para los estos, siguiendo por Rioflorido, ‘Octubre’ presenta sencillas formas que van ganando enjundia con las escuchas. Percusión y acústicas dan calor a una voz que juega con naturalidad y fragilidad lírica por momentos susurrada. No podía faltar una referencia a la influencia dylaniana, que se hace muy latente en temas como ‘El Perdedor’.
Hermoso medio tiempo de tono sobrio en ‘Como Todos’, con cuidados aderezos de slide, que derivaran en un delicioso solo final. La parte final juega más a variar las formas para demostrar (por si hiciera falta) las distintas capacidades de Santero y Los Muchachos. En ‘Algo Más’ encontramos un cálido ritmo con ligeros matices de soul y hasta ascendencia crooner. En ‘Para Siempre No Existe’ nos sorprenden las rítmicas tropicales y reggae, que al principio choca pero que, a la postre, acaba siendo uno de los cortes sin grandilocuencias más agradecido.
En ‘Guantanamera’ se apunta claramente un toque sureño, que refuerza lo fronterizo con un tramo declamado. Aunque la barrilla por el desierto la vemos de todas, todas, en la instrumental ‘Tierra Muerta’, que ejerce de tránsito hacia la despedida.
Por cierto, esta semana, este viernes para ser más exactos, comienza su gira de presentación en Alicante. Y seguirá por Bilbao, Santander, Madrid, Toledo, Gijón (Gijón Sound), Albacete, Valencia, Zaragoza, Barcelona, Javea (MontgoRock) y Murcia, así que no les pierdan la pista.
Una gran entrega de rock reposado, sin estridencias, con letras por encima de la media (que os invito de manera encaredida a prestar atención) y una ejecución perfecta.
¿Se le puede pedir algo más a un disco?
Lista de canciones – tracklist:
- Estamos Bien
- Mañana Asesina
- Volver a Casa
- He De Olvidarte
- Octubre
- El Perdedor
- Como Todos
- Algo Más
- Para Siempre No Existe
- Guantanamera
- Tierra Muerta
Publicado el marzo 20, 2019 en Críticas Discos y etiquetado en Críticas Discos, Ríoflorido, Santero y Los Muchachos. Guarda el enlace permanente. 2 comentarios.
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